La prevención juega un papel fundamental a la hora de manipular alimentos, por lo que se debe tener mucho cuidado con ciertos productos.
Lavar frutas y verduras. Foto: Unsplash
Si bien la higiene juega un papel fundamental en la prevención de enfermedades a la hora de preparar nuestros alimentos, se debe tener mucho cuidado con ciertos productos.
Según los expertos, es necesario tener en cuenta una serie de pasos esenciales y pocos elementos para garantizar la limpieza y seguridad de la comida, especialmente cuando se manejan frutas y verduras.
Frutas y verduras. Foto: Unsplash.
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¿Qué elementos se deben usar para lavar frutas y verduras?
Para garantizar la limpieza y seguridad de los alimentos, se necesita agua, jabón y tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
- Lavarse las manos: antes de manipular cualquier alimento debemos lavarnos bien las manos con jabón. Esto es crucial para evitar la transferencia de gérmenes a la comida.
- Enjuagar con agua corriente: se debe utilizar agua corriente para enjuagar las frutas y verduras para eliminar los restos de pesticidas y bacterias dañinas, como la Escherichia coli, la Salmonela o la Listeria.
- Evitar los productos químicos: no es necesario utilizar jabones, detergentes, alcohol, lavandina u otros productos desinfectantes para lavar tus alimentos. Estos productos pueden dejar residuos que son perjudiciales para la salud.
- Cepillar los alimentos duros: para alimentos como papas o manzanas, se puede utilizar un cepillo limpio para eliminar así la suciedad adherida.
- Secar adecuadamente: una vez enjuagados, los vegetales y frutas se tienen que secar sobre una superficie limpia utilizando un paño o papel de cocina. En caso contrario dejarlos húmedos puede promover el crecimiento de bacterias.
- Eliminar partes dañadas: antes de consumir, es necesario inspeccionar las frutas y verduras y eliminar las zonas que estén dañadas, ya que los microbios tienden a entrar más fácilmente por ahí.
Lavar frutas y verduras. Foto: Unsplash
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La importancia de la bacha de la cocina
A la hora de manipular alimentos, es de suma importancia asegurar que la cocina esté limpia. Para ello, se debe:
- Retirar los los restos de comida y desechos sólidos de la bacha. Esta acción se puede hacer con un cepillo o una espátula para facilitar esta tarea.
- Utilizar un limpiador multiusos o específico para superficies de cocina. El mismo debe ser compatible con el material de la bacha (acero inoxidable, cerámica, etc.).
- Aplicar el limpiador en toda la superficie de la bacha y dejarlo actuar según las indicaciones.
- Utilizar una esponja o cepillo suave para limpiar la superficie.
- Enjuagar con agua caliente para eliminar cualquier residuo de limpiador y suciedad.
- Secar con un paño limpio para evitar la formación de manchas de agua.