García Ferré, genio que hizo más feliz nuestra infancia

Fue padre de Hijitus, Anteojito, Larguirucho y tantos otros queridos personajes. De alguna manera, también fue nuestro padre. Con él, se lleva su magia pero estará siempre en nuestros corazones. VOTA EN LA ENCUESTA DE 26NOTICIAS.

Por Canal26

Sábado 30 de Marzo de 2013 - 00:00

Hay personas que le dieron muchas alegrías a nuestra vida y uno de ellos fue Manuel García Ferré. Creador de tantos queridos personajes, de su mano nacieron esas simpáticas criaturas que siempre estarán en nuestros corazones... como ese pequeño gran hombre, un verdadero genio.

El artista gráfico dio vida a Hijitus y su alter ego Superhijitus. Un pequeño hombrecito de sombrerito azul con su inseparable compañero Pichichus que, ante la injusticia, se sumergía en su “sombrero sombreritus” para hacer el bien. Enfrentando a esos malechores queribles como Neurus, Pucho y compañía. A veces, hasta con el propio Larguirucho que quedaba en el medio de algún problema por ser tan inocente. Y con esas voces creadas por la genialidad de Pelusa Suero.

También creó a Anteojito, el chico con lentes que tuvo hasta su propia revista y que siempre estaba en compañía de su tío Antifaz. El pequeño conquistó con su ternura y su bondad, y siempre ayudó a su tío científico en sus inventos y fórmulas. La mala en sus aventuras era la inolvidable Bruja Cachavacha.

Por su parte, Calculín era el genio de los cálculos, el que te enseñaba de una manera divertida con su “Saber más”. Hablaba de las manos y por qué tenemos cinco dedos, explicaba sobre la tierra y por qué desaparecieron los dinosaurios, los continentes flotantes, la leche, el hierro, el hipo y tantas cosas más.

Mientras que Petete era ese dulce personaje que cantaba y enseñaba con su Libro Gordo. Allá por la década del '70 fue parte de un micro televisivo junto a Gachi Ferrari con gran éxito. Pero no ocurrió lo mismo cuando a su lado estuvo una joven Guillermina Valdés, allá por el 2000. ¿Habían cambiado los tiempos? Sí, también los chicos. Pero aquellos nostálgicos siempre recordamos con cariño las creaciones de García Ferré.

Otros que ganaron su espacio en la tv y el cine fueron Trapito (1975), Ico, el caballito valiente (1981) y Corazón, las alegrías de Pantriste (2000). Un verdadero fenómeno causó Manuelita (1999), inspirada en aquella canción de la querida y recordada María Elena Walsh que se convirtió en un suceso con merchandising incluido.

El último film de este artista del dibujo fue Soledad y Larguirucho (2012). La chica de Arquito lo recordó con mucho cariño y lo describió como "una persona excepcional, con una fuerza terrible y que lograba todo lo que se proponía".

El párrafo aparte se lo lleva Larguirucho, que tantas satisfacciones le trajo a García Ferré y a Pelusa Suero. Estuvo con todos y en todas las películas. A veces muy astuto, otras no tanto. De bueno y de malo, pero siempre con sus travesuras. ¿Tal vez sea su mejor creación? Quizá, aunque todo aquel personaje que salió de sus manos -llámese Hijitus, Anteojito, entre tantos otros-, vivirá por siempre en todos los que llevamos un niño en el corazón.

Por Claudia Seta @setaclaudia