El líder de las Fuerza Quds iraní reaparece en la TV estatal tras rumores sobre su estado

Teherán, 15 oct (EFE).- El comandante en jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria iraní, el general de brigada Esmail Qaani, reapareció en unas imágenes de la televisión estatal iraní, después de que se especulara sobre que podría haber sido herido en la campaña de bombardeos de Israel contra Beirut.

El general apareció en unas imágenes retransmitidas en directo este martes por la cadena estatal iraní IRIB, recogidas por otros medios locales como Press Tv, con motivo de la recepción en Irán del cuerpo del general de brigada de la Guardia Revolucionaria Abbas Nilforushan, fallecido en un ataque de Israel a Beirut.

Nilforushan falleció en el mismo ataque israelí contra Beirut del 28 de septiembre en el que murió el líder de la milicia libanesa Hizbolá Hasán Nasrala.

Serían las primeras imágenes en semanas del jefe de la Fuerza Quds, brazo exterior de la Guardia Revolucionaria que opera en Líbano, Gaza, Irak y en otras zonas vinculadas a sus aliados.

La semana pasada la Fuerza Quds aseguró que su comandante en jefe se encontraba “sano y salvo” realizando su trabajo, en medio de las especulaciones acerca de su paradero y su estado de salud.

“Muchos nos preguntan ¿qué pasó con el general de brigada Qaani? Él está sano y salvo y está realizando su trabajo”, indicó el coordinador adjunto de la Fuerza Quds, Iraj Masjedi, en un comunicado recogido por medios iraníes.

El militar, de 67 años, no había aparecido en público en los últimos días, ni siquiera se le vio en el rezo colectivo del líder supremo de Irán, Ali Jameneí, del 4 de octubre en Teherán, el primero que daba en cuatro años.

Medios israelíes como la televisión N12 habían informado de que Qaani podría haber sido herido en la campaña de bombardeos del Estado judío contra Beirut, extremo que no se había confirmado.

Qaani fue nombrado comandante en jefe de la Fuerza Quds en 2020, tras el asesinato de su antecesor el general Qasem Soleimaní en Irak por parte de Estados Unidos.

Como respuesta a esa muerte, Teherán lanzó un ataque contra una base estadounidense en Irak, que apenas causó daños.

Las especulaciones acerca de la situación del alto cargo militar se produjeron en medio de fuertes tensiones en Oriente Medio y a la espera de una posible represalia israelí al ataque iraní con misiles del 1 de octubre. EFE

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