Agua: fundamental para la seguridad energética

Por Canal26

Sábado 22 de Marzo de 2014 - 00:00

El organismo de las Naciones Unidas para la alimentación y agricultura (FAO) consideró que "el agua, la energía y la seguridad alimentaria están estrechamente ligadas", por lo que abogó por "el cuidado de los recursos hídricos para continuar avanzando en la lucha contra el hambre".

Al conmemorarse este sábado el Día Mundial del Agua y este año su foco está puesto en el nexo entre el agua y la energía, un aspecto clave si se considera que de todas las energías renovables, la hidroeléctrica es la más extendida ya que representa el 16% de todas las fuentes energéticas actuales.

"Debemos comprender la interdependencia que existe entre el agua, la energía y la seguridad alimentaria. El 75% del uso industrial de agua se destina a la generación de energía. Si no gestionamos de manera sostenible este recurso vital, no podremos avanzar hacia la erradicación plena del hambre", señaló la representante Regional Adjunta de la FAO, Eve Crowley.

A nivel global, se estima que 780 millones de personas carecen de acceso a agua potable y 2,5 mil millones carecen de servicios de saneamiento, mientras que 1.3 mil millones de personas no tienen acceso a electricidad.

Se estima que la demanda global de agua podría superar en un 44% los recursos disponibles anuales en 2050 y la demanda de energía podría aumentar en un 50% de aquí a esa fecha.

En términos de uso, la agricultura representa la principal fuente de consumo de agua dulce (70%), el resto se utiliza para uso doméstico (17%) e industrial (13%).

Mientras que, según el informe, en América Latina y el Caribe, hay una presión creciente sobre los recursos hídricos, por factores climáticos como las sequías e inundaciones y por actividades económicas que requieren mucha agua, como la minería y la agricultura de regadío.

Todavía hay 35 millones de personas en la región sin acceso a fuentes de agua potable y cerca de 110 millones sin servicios de saneamiento mientras que para el Banco Mundial, en América Latina, un 45% del agua se pierde antes de llegar al cliente.

A pesar de ser una región rica en recursos energéticos como hidrocarburos, energía hidroeléctrica y biocombustibles, esta riqueza está desigualmente distribuida: aproximadamente 34 millones de personas carecen de acceso a los servicios modernos de electricidad.

El agua necesita energía para ser purificada, transportada, presurizada y depurada, mientras que la mayor parte de los procesos de producción de energía requieren agua para aspectos como refrigeración y extracción, entre otros.

"Se trata de dos recursos íntimamente ligados y que a su vez impactan los sistemas alimentarios", informó la FAO al tiempo que advirtió que los gobiernos deben crear políticas energéticas.

Las políticas deben tener en cuenta los nexos que existen entre la producción de alimentos, la generación de energía y la sustentabilidad del recurso hídrico.