Descubren una red con más de 50 mil esclavos

Las autoridades chinas desbarataron una red de más de 50.000 obreros inmigrantes, entre ellos niños y discapacitados, a los que tenían trabajando como esclavos en hornos ilegales de ladrillos en la provincia septentrional de Shanxi.

El vicegobernador de Shanxi, Fan Duixiang, señaló ante el Legislativo chino que su gobierno inspeccionó 3.347 hornos, de los que 2.346 operaban de forma ilegal y en los que trabajaban 53.036 esclavos, informó el diario South China Morning Post.

Fan destacó tres problemas principales en este escándalo: la contratación ilegal de inmigrantes mediante el engaño, la restricción de libertad de estos obreros y el uso de niños.

Según datos provinciales, en Shanxi trabajan más de 100.000 inmigrantes en 8.760 pequeños hornos de ladrillos, minas y refinerías, industrias que también están siendo investigadas.

Al mismo tiempo, una docena de padres continúan buscando a sus hijos, que habían sido vendidos como esclavos en estas fábricas de Shanxi, informó el diario El Mundo en su edición digital.

El ministerio de Seguridad Pública ofreció una recompensa de para quien ayude a localizar a los ocho capataces implicados en el escándalo de esclavos.

Según informa la agencia estatal china Xinhua, los ocho capataces son sospechosos de golpear y esclavizar a cientos de trabajadores en fábricas ilegales de Shanxi, de los que hasta ahora 359 fueron liberados, entre ellos 12 niños y 65
discapacitados.

Esta semana Xinhua informó de que al menos 55 personas estaban siendo investigadas en 15 casos separados de esclavitud en fábricas de ladrillos.

El escándalo se destapó a principios de mes cuando se descubrió que en más de 8.000 hornos y pequeñas minas de carbón en las provincias de Shanxi y Henan (centro) trabajaban esclavos, de los que se liberaron en ambas provincias un total de 591, entre ellos 51 niños.