“Julio Bocca fue mi matrimonio de la danza y me ponía celosa cuando bailaba con otras”

Así lo aseguró la bailarina Eleonora Cassano. “Mi carrera me enseñó que nunca hay que descartar cosas” , remarcó la máxima figura de la danza femenina argentina. De hecho, fue tapa de Playboy y hasta fantasea con participar de "Bailando por un sueño".

Por Canal26

Jueves 25 de Octubre de 2012 - 00:00

Podría haber sido una bailarina prolija de cajita de música pero rompió con el molde de lo clásico. Fue eso y mucho más. Hoy es la máxima figura de la danza femenina.

Egresó del Instituto Superior de Arte del Teatro Colón en 1983 y tuvo varios roles protagónicos en teatro junto al también bailarín Julio Bocca.

Y a diferencia de otras bailarinas, ella lució su embarazo hasta arriba del escenario. Su cuerpo casi no sufrió modificaciones y bailó hasta el final. “Tuve la necesidad de ser mamá. Llevaba 10 años de casada y estaba en pleno éxito con Julio. Bailé hasta que tuve contracciones. No tenía nada de panza y hasta el quinto mes solo había aumentado un kilo y medio. Hacía funciones de miércoles a domingo y los sábados hacía dos funciones. Pero me sentía bárbaro, con energía”, contó a Canal 26.

Entrevistada por Brenda Brecher para el especial “Con voz de mujer”, Eleonora recordó que a lo largo de mi carrera le han pasado un montón de cosas arriba del escenario. “Se me ha descocido vestuario, se me han roto zapatillas de punta, bailé sin las uñas del dedo gordo, caí desplomada al piso y me levanté para seguir como si nada hubiera pasada. Una vez se me resbaló la pierna y me fui de trompa al piso. Me levanté y seguí. Otra vez se me salió la peluca, es espantoso porque abajado de la peluca nos tenemos que poner una media en la cabeza. Cuando terminé me puse a llorar. Pero la experiencia me llevó a sobrellevar estos episodios”, relató.

Comenzó a bailar junto a Julio Bocca en 1989 y participó en la creación de su ballet argentino. “Julio fue mi matrimonio de la danza y Sergio el de mi vida real. Yo me ponía celosa cuando bailaba con otras”.

Entre su repertorio se incluyen “Romeo y Julieta”, “Don Quijote” y “Cascanueces”. También se animó al music-hall con espectáculos como “La Cassano en el Maipo” y “Cassano Dancing”.

Su lema es “no descartar” ninguna propuesta laboral. De hecho, cuando muchos de sus colegas consagrados salieron a criticar a Hernán Piquín por su labor en “Bailando por un sueño”, ella dijo públicamente que le gustaba ese show.

“El programa de Tinelli algo aporta. Porque hay mucha gente que conoce cierto tipo de danzas gracias al programa”, remarcó.

“Mi carrera me enseñó que nunca hay que descartar las cosas” y dejó abierta la puerta a un nuevo llamado para sumarse a ShowMatch.

En el 93 se desnudó para Playboy. “Julio, mi marido y Lino Patalano me convencieron. Fue arte puro con cuerpos desnudos. Me lo pintaron por otro lado. Dimos muestras que se puede hacer un desnudo claramente artístico”.

Pero más allá de que toda su vida fue dedicada a la danza dijo: “Me quedó pendiente hacer un infantil”. Y admitió que “en un momento casi lo hicimos con Lino Patalano, pero no se dio”.

Eleonora vuelva cada vez que se sube a un escenario y los espectadores sentimos que volamos con ella cada vez que la vemos bailar.