Terremoto en San Juan: el drama también golpeó a la localidad de Caucete en 1977

Terremoto en Caucete, San Juan, en 1977.

Este martes, la provincia argentina de San Juan se vio sacudida por un violento terremoto de 6,8 grados que provocó graves daños. Si embargo, no es la primera vez que esto sucede, ya que hubo dos marcantes antecedentes.

El primero en el año 1944, y el segundo -y tal vez el más fuerte- en el año 1977, afectando muy especialmente a la localidad de Caucete. Fue una verdadera tragedia provincial y nacional.

El terremoto de Caucete se produjo el 23 de noviembre de 1977, a las 06:23 horas, y quedó grabado para siempre en la memoria colectiva.

Treinta y tres años después del sismo de 1944, una moderna ciudad de San Juan -remodelada en materia edilicia tras el primer movimiento sísmico- fue nuevamente castigada por la naturaleza con un terremoto de magnitud 7,4, según la escala de Richter.

Técnicamente se trató de dos terremotos, uno registrado a las 6:26 de magnitud 6,6 con epicentro en el sector noreste de le sierra de Pie de Palo; que ofició de disparador de un segundo movimiento que se produjo 20 segundos después, con una magnitud de 7 e intensidad IX según la escala Mercalli Modificada. El epicentro se localizó en el extremo sudeste de la misma serranía a una profundidad de 25 kilómetros.

A diferencia del sismo de 1944, las víctimas fatales que ocasionó el llamado “Terremoto de Caucete” sumaron 65 y más de 300 heridos.

El epicentro del violento terremoto de 1977 estuvo en 31°02′23″S 67°45′36″O, su hipocentro a una profundidad de 17 km. Se sintió con una intensidad de grado IX en la escala de Mercalli, y registró una Magnitud Momento (Mw) de 7.4.

El terremoto causó 65 víctimas fatales (aunque autoridades locales estiman actualmente que hubo unas 125 víctimas), destruyó casas y edificios en toda la región, con énfasis en la ciudad de Caucete. Los mayores daños se produjeron en las construcciones de adobe. Al igual que en los sismos anteriores, se produjeron fenómenos de licuefacción de suelo, al este del valle del Tulum y valle del río Bermejo. Se originaron cráteres y volcanes de arena, derrames laterales y violentas salidas de agua con hasta tres metros de altura.

Casas destruidas en Caucete, provincia de San Juan.

La red vial fue enormemente afectada, como así también la red de riego y drenaje y la infraestructura ferroviaria. Por la licuefacción se produjeron numerosos daños en las líneas de transmisión de energía, redes de distribución de agua potable, perforaciones para riego. También hubo daños en numerosas obras civiles aún no inauguradas, como barrios y escuelas.

El terremoto de 1977 se asoció al sistema de fallas de Ampacama-Niquizanga, durante el cual se produjo la ruptura superficial y un desplazamiento vertical promedio de 30 cm., según un relevamiento geodésico efectuado en 1982. También ocasionó daños al norte del Área Metropolitana del Gran Mendoza. En edificios altos, a más de 1000 km de distancia, se sintieron sus efectos apreciablemente.

El Grupo 1 de Comunicaciones Escuela de la Fuerza Aérea Argentina fue la unidad responsable de restablecer las comunicaciones mientras permaneció el estado de emergencia en la región. Fue un auténtico infierno que, literalmente, partió la tierra.