Una cordobesa destrozó a las chilenas en el “Bikini Open” de Valparaiso

“Soy nacionalista, así que el trasero ganador tiene que ser chileno”, lanzó desafiante María Laura Donoso, minutos antes de que empezará el Miss Reef de Chile, el generoso desfile de féminas en diminutos trajes de baño, que este año tuvo lugar en el Muelle Barón de Valparaíso.

Sin embargo, según cuenta el diario Las Últimas Noticias, la modelo no contaba con el notable desplante que tuvieron las participantes argentinas y la dominicana Glenny Rosado.

Ya en la fiesta previa al concurso las argentinas se la jugaron a pura coquetería con los noteros de la TV local, quienes no desaprovecharon la oportunidad para tocar más de lo necesario.

A esa altura las cordobesas Noelia y Laura, junto a sus compatriotas menearon sus faldas a centímetros de las cámaras que grabaron hasta la saciedad los bailes eróticos de las chicas.

Jocelyn Medina, la chilena de 21 años que llegó como favorita, apenas miró la escena desde la barra, pero bien escondida. A su lado, Carla Ochoa, otra diosa trasandina, promocionaba hasta el cansancio una bebida energizante. “La tomo todos los días y mira cómo está mi figura”, mintió entre risas la maniquí, quien aseguró que ella no participaba en el Miss Reef, “porque soy mucho más que un trasero o un cuerpo bonito”.

Recién a las dos de la mañana llegó la hora de la verdad. Doce mujeres esculturales a merced de los gritos de unos mil quinientos muchachos que pagaron 10 mil pesos por ver redondeces de excepción. Claro, porque si bien el concurso se anunció como el plato fuerte de una fiesta electrónica, la mayoría tenía un plan claro.

Dos quince y era tanto el frío que el primer paseo de las concursantes fue con parka, lo que obviamente generó el abucheo de los asistentes. Y la noche continuó recatada porque la animadora del Miss Reef, la uruguaya Natalia Méndez, especificó de entrada que “no habrá sentadillas, ni jueguitos”. De nuevo las pifias de los excitados hombres de las primeras filas.

Segunda pasada y la figura de Jocelyn nada pudo hacer contra las posaderas criollas. A la final llegaron las argentinas Mara y Noelia, además de la dominicana Glenny Rosado, quien era la favorita del público. La caribeña se robó los aplausos, gracias a que tiene la curiosa habilidad de que su trasero continúa en movimiento incluso cuando está estática.

Pero el jurado, con Gonzalo Feito y Andrés Salfate, optó por la morocha Noelia Chazarreta (27) quien se ganó un auto cero kilómetro. “Los chilenos me trataron con amor, porque saben que esta colita no es sólo genética. Subo muchas escaleras y me encanta hacer sentadillas”, admitió antes de destapar una botella de champaña.