Un nuevo ataque ruso puso en peligro a una central nuclear de Ucrania

La central de Pivdennoukrainsk, atacada por Rusia. Foto: Reuters.

La guerra entre Rusia y Ucrania continúa. Este lunes, los militares rusos lanzaron un ataque con misiles contra la segunda mayor central nuclear ucraniana, ubicada en Pivdennoukrainsk, informó la empresa estatal Energoatom, quien precisó que uno de los proyectiles impactó a 300 metros de los reactores; no hubo víctimas.

"Hoy, 19 de septiembre de 2022, a las 00.20 horas, el ejército ruso ha llevado a cabo un ataque con misiles contra el polígono industrial de la central nuclear Ucrania del Sur", comunicó la compañía. Además, detalló que se sintió una "potente expansión" que dañó a los edificios de la central rompiendo más de 100 ventanas.

También, el ataque produjo un breve corte de electricidad y una de las unidades de la central hidroeléctrica Oleksandrivska, que forma parte del complejo energético del sur de Ucrania, se apagó. Sin embargo, Energoatom confirmó que las tres unidades de energía de la central volvieron a trabajar con normalidad en el transcurso del día.

Voceros de la empresa energética advirtieron que los "actos de terrorismo nuclear" ocasionados por las tropas rusas "amenazan al mundo entero" y pidieron, por favor, que se detengan rápidamente "para evitar un nuevo desastre".

La central nuclear atacada con misiles por parte de Rusia. Foto: Reuters.

El presidente ucraniano Volodimir Zelenski, también se expresó respecto al violento ataque a través de su cuenta de Telegram: "Los ocupantes querían volver a disparar, pero olvidaron lo que es una central nuclear. Rusia está poniendo en peligro a todo el mundo. Tenemos que detenerla antes de que sea demasiado tarde".

Por su parte, el Ministro de Energía, German Galushchenko dijo que, en caso de haber un "invierno nuclear" debido a los ataque rusos contra las instalaciones atómicas ucranianas, el problema los precios eléctricos elevados "ya no será relevante".

Este enfrentamiento ocurrió en un contexto en el cual las fuerzas rusas sufren varios reveses y se han retirado de una gran parte del noreste del país ucraniano después de la contraofensiva en la región de Járkov.