Andrea Bocelli: noche mágica del encantador lírico pop

Andrea Bocelli vive por la música, alguna vez la definió: “Ella entre toda es la más
dulce y caliente como un beso”. Ese efusivo beso lo dio con su impecable garganta a los argentinos, y extranjeros, que disfrutaron de su talento desplegado en G.E.B.A.

El tenor salió a escena en horario puntual, con el más absoluto respeto, ante su público que lo esperaba desde hace unos quince años. Impecablemente vestido, acompañado por el director de la orquesta, Eugene Kohn, y un gran número de músicos que sonaban como dentro de un teatro y no un estadio, como en esta ocasión.

La mística de Bocelli se mantiene intacta y a pesar de los cuestionamientos por esa delgada línea entre lo lírico y el poco, el artista logra conmover, emocionar y conquistar al espectador. Cuando alguien logra erizar la piel, es la muestra más clara de que nació para su arte.

En este tour llamado “Incanto”, el tenor divide el show en dos partes. En la primera, inicia un viaje entre Von Suppé, Verdi, Mascagni y Puccini, entre otros. Así, deslumbra con “La donna e' mobile”, “Viva il vino spumeggiante”, “Stridono Iassú”, “M' appari, tutto amor”, “Di tale amor che dirsi”, “Brindisi”.

Para la segunda parte, dejó algunos clásicos que fueron cantados o tarareados por el público. Desde “Amapola”, “Mamma”, “Granada” o “Funiculi Funicula”. Entre opera y opera, lo acompañó la soprano Ana María Martínez, de impecable trabajo vocal en escena. Dueña de una agudos altísimos, acopló su voz en cada interpretación con Andrea.

En la cálida noche de Geba, se sucedieron “Musica proibita”, “Canción de Paloma”, “Non ti scordar di me”, “I could have danced all night”. Bocelli dedicó su show a Diego Maradona y al futbolista Julio Cruz, quienes se encontraban en el lugar. Regaló sonrisas a cada ovación del público. Vistió de negro para el primer acto y con saco blanco y pantalón oscuro para la segunda.

La perlita de este show llegó con los duetos junto a Chenoa, la cantante nacida en Argentina que se hizo popular en el Operación Triunfo de España, donde reside actualmente y donde hace unos años vivió un romance con una estrella del pop: David Bisbal. La artista se unió a Bocelli para cantar “Somos novios” y “Il canto della terra”. Y si bien no es su género, demostró que puede meterse en él con altura.

Tras los aplausos, ovaciones y el pedido de “otra”, el tenor salió, agradeció y dijo “y ahora les dedico esta canción”... Inmediatamente, su voz comenzó a entonar “Bésame mucho”. Era la hora de los bises, la hora de sus dos más grandes clásicos: “Vivo per lei”, junto a Chenoa; “Con Te Partirò”, junto a Ana María Martínez. Ante la efusividad del público y el pedido de una canción más, regaló una nueva interpretación de “Granada”. Punto final para una noche única de un artista único.

(Claudia Seta para 26Noticias)