La boda de Justin habría desequilibrado a Selena, quien lidia con tratamientos debido a su lupus y hasta un trasplante de riñón, lo que derivó en una nueva internación.
El cantante declaró que “se siente triste y arrepentido por Selena y sabe lo que es pasar por un momento difícil. Él realmente quiere que ella sea feliz, y está mal sabiendo que está luchando con sus problemas de salud”.
Justin está centrado en su esposa y en la vida que están construyendo juntos, pero le está costando mucho el no dejar que sus emociones lo afecten.
Hailey ha sido un gran apoyo para Justin y definitivamente cuida de él. Están felices cómo está su relación en este momento y están tratando de vivir sus vidas lo más normal posible.