Hombre mató a delincuente que ingresó en su casa

Un hombre que estaba con su mujer y sus pequeños hijos con amiguitos de la escuela mirando el partido de Argentina y Nigeria mató esta tarde a un ladrón que entró a robar a su casa de San Isidro junto a un cómplice que logró escapar.

Fuentes policiales le informaron que el hecho ocurrió a las 14.30 en una vivienda de Joaquín V. González al 1600 de esa ciudad del norte del Gran Buenos Aires.

Los voceros explicaron que dos hombres de unos 25 años, armados con pistolas calibre 9 milímetros, entraron al domicilio trepando por las rejas del frente.

Una vez adentro de la propiedad, los sujetos caminaron por un costado de la vivienda, llegaron hasta el fondo y lograron entrar al living, donde sorprendieron a las víctimas.

Los informantes indicaron que en ese momento se encontraban el matrimonio dueño de casa, sus dos pequeños hijos y los amiguitos de los chicos mirando el partido de Argentina, quienes fueron amenazados por los intrusos con sus armas.

En una rápida pero también temeraria reacción, el hombre corrió hacia su habitación ubicada en la planta alta para tomar su pistola calibre 11.25, pero se le trabó en el cajón donde la tenía escondida.

El dueño de casa fue alcanzado por uno de los delincuentes, con quien protagonizó un forcejeo, pero en medio de la pelea, el hombreo logró sacar su arma y mató al maleante de al menos un tiro en el cuello.

En ese momento, el cómplice de ese sujeto, que estaba abajo con los chicos y la mujer, advirtió que su compañero había sido atacado por el dueño de casa y que estaba muerto, por lo cual escapó de la vivienda corriendo. Las fuentes indicaron que el matrimonio y los nenes salieron ilesos del asalto, aunque debieron ser revisados por médicos de una ambulancia ante un posible shock emocional por el violento episodio que vivieron.

Agentes de la Policía Científica secuestraron en la habitación del dueño de casa la pistola 11.25 del hombre y la 9 milímetros del ladrón muerto.

Según se explicó, el propietario de la casa fue demorado en la comisaría de Villa Adelina, aunque rápidamente recuperó la libertad cuando la Justicia entendió que había actuado en legítima defensa en el hecho.