Antenas y celulares 5G: la salud en peligro

Tecnología 5G. Transformación y conexión sin precedentes. Foto: Redacción canal26.com

El avance de la tecnología a veces puede representar un riesgo para la salud. Así parece ser el caso del desarrollo de la tecnología 5G, ya que las antenas y los teléfonos celulares emiten radiaciones electromagnéticas que podrían afectar la salud de las personas.

En los últimos tiempos, creció la preocupación y los reclamos sobre los gobiernos para que se tomen medidas preventivas, dado el contexto. Incluso la Organización Mundial de la Salud clasificó a estos campos electromagnéticos como posibles “cancerígenos”. En la misma línea, ante el desarrollo de esta tecnología, también científicos independientes y organizaciones de la sociedad civil de distintas partes del mundo exigen mayores controles y evaluaciones sobre la tecnología inalámbrica; estos grupos piden, sobre todo, que se informe a la población sobre los posibles riesgos y medidas de prevención que se podrían tomar.

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La tecnología de quinta generación implica una nueva infraestructura 

Para que el 5G funcione, es necesario instalar una nueva infraestructura. En el caso del 5 G en Argentina, esto supondría duplicar la cantidad de antenas y disponerlas a una distancia menor, unas de otras. Según algunos informes, para tener una conexión aceptable hacia el año 2030, el país tendría que contar con al menos 60.000 sitios con antenas de telefonía móvil. 

A mediados de 2023, según el último informe oficial, existían 26.735 sitios. La mitad de ellos, en la ciudad y en la provincia de Buenos Aires. Frente a esto, aumentó el rechazo ciudadano a la instalación de antenas, en especial cerca de hogares, escuelas, clubes y centros de salud. 

Así, organizaciones y vecinos exigen a las autoridades mayor regulación y control de la cantidad de antenas, su localización y la potencia a la que se les permite irradiar.