Y Rio de Janeiro volvió a deslumbrar con su carnaval
Por Canal26
Martes 8 de Marzo de 2011 - 00:00
Colosal y exhibicionista, el show del Sambódromo -"el mayor espectáculo de la Tierra", según lo definen en Río- se presta al duelo de vanidades entre danzarinas y figuras del mundo del espectáculo o el deporte, acosados por los "paparazzi" que merodean los camarotes. Sin embargo, el desfile de este año es menos majestuoso que el de ediciones anteriores, ya que tres grupos no pueden presentarse con todo su esplendor dado que sus talleres fueron destruidos por un incendio el mes pasado.
Cerca de un millón de turistas brasileños y extranjeros, algunos llegados en una decena de cruceros, hacen del carnaval de Río, televisado a decenas de países Ronaldinho Gaúcho, vestido con frac blanco y moño rojo, se sumó al desfile de Mangueira en la mañana de ayer, y antes, con otro frac con vivos azules, había acompañado a las danzarinas de la "escola" Portela.
La modelo Giselle Bundchen, nativa de Río Grande do Sul participó en la comparsa Vila Isabel, y desde lo alto de una carroza saludó al público pero evitó danzar samba como lo hacían las cariocas que la precedieron.
En tanto, uno de los "carnavalescos" (autores de las coreografías y el guión de las comparsas) más mentados en estos días es Paulo Barros, del grupo Unidos de Tijuca, autor del espectáculo vencedor del carnaval de 2010 y uno de los favoritos para ganar nuevamente este año. En la madrugada del lunes esa comparsa deslumbró con un espectáculo de música, magia y tecnología, dejando boquiabiertos a los espectadores que aplaudieron a rabiar.
Esa primera noche desfilaron seis "escolas do samba", con carrozas gigantes y bailarinas aclamadas por cerca de 80.000 espectadores.
Con un enredo dedicado al autor de sambas Nelson Cavaquinho, que en 2011 cumpliría 100 años, los 4.000 integrantes de Mangueira cerraron el espectáculo del Grupo Especial carioca, la élite de las comparsas brasileñas.
El gobernador de Río de Janeiro, Sergio Cabral, celebró que los grupos presentados ese día pertenezcan a favelas ocupadas por la Policía en el marco de la lucha contra el narcotráfico.
Esta vez Dilma Rousseff, que en 2010 cuando era candidata presidencial estuvo en el Sambódromo, permaneció el fin de semana junto a su hija y nieto en una base de la Aeronáutica en el estado de Río Grande do Norte, donde militares establecieron un cerco para impedir que reporteros o turistas puedan tomar imágenes.
Anoche en la segunda parte del desfile se esperaba el momento más emotivo, ya que una de las escuelas participantes es Grande Río, una agrupación que perdió todos sus trajes y carros en un incendio y que, a fuerza de trabajo y solidaridad, logró llegar al espectáculo.
Con un cuento sobre una isla encantada que representa a Florianópolis, capital del Estado de Santa Catarina, en el Sur del país, la `escola tricolor` no participará del concurso oficial, al igual que Portela y Uniao da Ilha que ya desfilaron y que también se vieron afectadas, aunque en menor medida, por el incendio.
Fue un largo camino para poder llegar al Sambódromo a tiempo, que requirió días y noches enteros de trabajo de sus integrantes y también la solidaridad de otras escuelas de samba, que donaron telas, prestaron chasis de carros e incluso cedieron costureras.
"Debimos empezar de cero y rehacer en un mes el trabajo de todo un año. Solo el entusiasmo de la gente por desfilar no se quemó", dijo a la AFP con lágrimas en los ojos Cae Rodrigues, escenógrafo de Grande Río.
"Carnaval de la superación", "Carnaval de la solidaridad"... El 2011 ofrece a los 80.000 espectadores que colman el Sambódromo en las dos noches de desfiles, una muestra de capacidad organizativa en la ciudad que será sede de los Juegos Olímpicos de 2016 y albergará una subsede del Mundial 2014.
La primera noche desfilaron seis "escolas do samba", con carrozas gigantes y bailarinas aclamadas por cerca de 80.000 espectadores.
El principal desfile del carnaval brasileño comenzó a las 21:10 horas del domingo, con el ingreso de la comparsa Sao Clemente, con un espectáculo dedicado a Río.
La deslumbrante Renata Santos, luciendo un atuendo brillante con plumas azules, fue la estrella de Mangueira que derrochó lujo a su paso por el Sambódromo. Ronaldinho Gaúcho, vestido con frac blanco y moño rojo, se sumó al desfile de Mangueira y antes al de Portela.
Dilma Rousseff, que en 2010 cuando era candidata presidencial estuvo en el Sambódromo, optó por pasar el fin de semana junto a su hija y nieto, custodiada para evitar que pudieran acceder a ella fotógrafos y periodistas. , una vidriera codiciada también por empresas como la cervecería Brahma, que montó un camarote gigante.
En sus salas VIP estaban en la madrugada del lunes la actriz Pamela Anderson y su prometido, el recién jubilado atacante Ronaldo, el juvenil crack de la selección brasileña Neymar y el mediocampista argentino Darío Conca. Pero esos fueron sólo algunos de los famosos.