Informe Canal 26: repudio de vecinos por desalojo de confitería "Boston"

En la madrugada de este miércoles la Policía de la Provincia de Buenos Aires desalojó a los dos empleados que pasaban la noche en el local de la confitería "Boston", tomado desde hace varios meses por los trabajadores en el marco de un conflicto por el cierre de sucursales. El lugar permanece vallado y con fuerte presencia policial y empleados han denunciado que el municipio, a cargo de Carlos Arroyo, los "abandonó".

Un informe exclusivo de CANAL 26 reunió distintos testimonios de turistas y marplatenses que expresaron su malestar y repudio por el desalojo de la confitería que se convirtió en todo un emblema de la ciudad.

"Es una situación lamentable", expresó un vecino de la zona mientras que una mujer manifestó que esto es "horrible, se ve muy feo".

"Íbamos todas las mañana a comprar el desayuno a la confitería", dijo una de las turistas que no puede entender lo que ha sucedido con la mítica confitería.

"No puede ser que de la noche a la mañana desaparezca una confitería como esta, es un emblema", se lamentó uno de los vecinos que también comentó que hace poco había ido a tomar un café.

Otro marplatense expresó su pena por el desalojo que sufrieron los empleados de la confitería y agregó: "Los trabajadores vendían medialunas y uno pagaba a voluntad. Ahora vengo y me encuentro con esto, los empleados no le hacían mal a nadie".

"Son dos socios que estafaron al resto de los empleados" concluyó uno de los testimonios y finalizó: "estas cosas en Mar del Plata no pueden pasar".

La Boston abrió sus puertas en el año 1958 en Mar del Plata y a fuerza de sus medialunas y su pastelería se convirtió en un clásico de la ciudad balnearia. En 2016 llegó a tener seis locales cuando fue adquirida por un empresario austríaco y dos marplatenses, que prometían inversión y la apertura de más sucursales.

Sin embargo en enero de 2018 comenzaron a cerrar varios de los establecimientos, a pagar los sueldos en cuotas, hasta abril del año pasado cuando dejaron de pagarlos definitivamente. Desde ese momento los empleados se mantuvieron en pie de lucha resistiendo en el edificio, del que hace unas horas fueron echados.