Pino Solanas y su "Viaje a los Pueblos Fumigados": glifosato, el peligro de los agrotóxicos

La emisión del documental de Pino Solanas, "Viaje a los Pueblos Fumigados", en Canal 26 y un debate junto al director y a especialistas y sobre los terribles riesgos de los agrotóxicos y cómo ha sido su experiencia al recorrer las diferentes provincias víctimas de la utilización de los productos.

Una vez emitido el documental "Viaje a los Pueblos Fumigados" por Canal 26, tuvo lugar el debate conducido por Diego Codini y que contó con Pino Solanas, guionista y director del film; Enrique Viale, abogado ambientalista; Miryam Gorban, Profesora de la Cátedra de Soberanía Alimentaria, y Nahuel Levaggi, Coordinador de Unión Trabajadores de la Tierra (UTT).

En dicho encuentro el senador relató su viaje por siete provincias argentinas, detallando en primera persona las secuelas sociales y ambientales que dejó el modelo transgénico con agrotóxicos. "El viaje estuvo motivado por muchas denuncias, fuimos conociendo un poco más esta realidad. Fuimos al encuentro de protagonista de esto como fumigadores, productores, víctimas y médicos que recibían a los enfermos. Descubrimos una realidad que se tiene oculta, en 2017 la Argentina fumigó alrededor de 340 millones de litros de glifosato", expresó.

Al ser consultado sobre el producto en cuestión, el senador dijo: "El glifosato es veneno, preparado para atacar los yuyos, bichos que pueden dañar la soja fabricada en laboratorios que ha sido modificada en laboratorios para ser resistente a este tóxico. La consecuencia es que se liquida también el suelo y esto trae como consecuencia la inundación de pueblos que no se habían inundado antes".

El director del documental fue muy duro con la legislación argentina sobre este tema: "En primer lugar no existen controles, no existe legislación necesaria para controlar y reducir fumigaciones".

Gorban por su parte explicó una realidad que nos toca de cerca con los productos que consumimos a diario: "Hay una realidad que se nos aparece a diario, tenemos que decir que un suelo desnutrido no puede dar comida que cumpla con los nutrientes necesarios. Además el modelo de cultivo hace esto de que pensemos que hay que cultivar con veneno, contaminan el suelo, agua y los alimentos de uso común que están en nuestra mesa".

La docente además recalcó que uno de los productos usados en el país ya se encuentra prohibido en California: "Hace poco en Estados Unidos se prohibió el uso de clorifos que es el veneno que más se utiliza en las hortalizas de Argentina".

Uno de los temas tratados fue la muerte de Fabián Tomasi, símbolo de los estragos que provocan los agroquímicos en el cuerpo y quien falleció a principios de septiembre. Era un testimonio de los estragos que provocan los agroquímicos en las personas que están en contacto con el veneno.

Tomasi había sido peón de campo y obrero antes de conseguir trabajo en 2005 para la empresa Molina en su Basavilbaso natal, en Entre Ríos, a unos 200 kilómetros de Paraná. No usaba nada que lo proteja de los venenos que manipulaba. Ni guantes. Él no quería colocarse los trajes, porque eran insoportables -sobre todo en verano-, pero tampoco se lo exigían los hermanos Molina, sus jefes, que años más tarde murieron de cáncer.

Al respecto comentaron: "Esto sucede porque en nuestro país no existe el control, lo que existe es una red de complicidades que silencia esta especie de genocidio silencioso. Chicos que nacen con serias malformaciones que no son denunciadas muchas veces por vergüenza".

Viale detalló porque la complicidad en este tema: "Detrás de esto está lo que se llama paquete tecnológico que creó una de las corporaciones más importantes que es Monsanto que se asoció con Bayer. Esta empresa vende todo el paquete: una semilla resistente al glifosato que ellos mismo producen y ha avanzado de forma cultural que se llama campo, pareciera como si no hubiera otra forma. Esto llega a la clase política y Argentina vive un experimento a cielo abierto con serias consecuencias".

Otro de los temas comentados en la mesa, fue el juicio millonario que perdió la empresa Monsanto con un hombre que padece cáncer terminal en Estados
Unidos. La justicia dispuso que la empresa pague 289 millones de dólares al jardinero que utilizó durante varios años un herbicida que contiene glifosato.

Dewayne Johnson de 46 años, es padre de tres hijos, y padece de linfoma no Hodgkin. Fue jardinero de una escuela y los médicos dicen que solo le quedan unos meses de vida. El hombre fue la primera persona que lleva a Monsanto a juicio por acusaciones de que el producto químico vendido bajo la marca Roundup está relacionado con el cáncer.

Levaggi dio a conocer la alternativa para terminar con este cultivo que tantas vidas se ha llevado: "Existe otra agricultura que nosotros llamamos agroecológica que nace en lo que llamamos suelos vivos, semillas libres, producción de bioinsumos que lo hacemos hoy en día. Lo estamos desarrollando con una tecnología apropiada que es real y que choca con los intereses del poder. Interpelamos al Estado para que legisle y garantice un alimento sano".

Al finalizar los especialistas reflexionaron sobre el tema: "El glifosato está en el Río Paraná, en las lluvias y hasta en el algodón de las toallas femeninas. Por primera vez en la historia nos quieren naturalizar que los alimentos tengan veneno. Tenemos que tener conciencia, no es un problema sólo de la gente del campo, debemos defender el derecho a la alimentación de generaciones futuras".

Pino Solanas cerró el debate volviendo a dejar un mensaje claro: "Es hora que la política se haga cargo de este tema, a todos nos contamina. No existe esa conciencia, la comisión de agricultura la preside un fumigador y estos temas deben abrirse para que dejen de hacer estragos".