Último adiós a Duffau

El joven Gastón Duffau fue sepultado en el Cementerio Colonial. Su cuerpo apareció boca abajo en la caja de una camioneta policial, semidesnudo, con los pies atados y con doble juego de esposas en sus manos. Su familia sigue luchando para encontrar Justicia. En exclusiva a Canal 26, su primo y abogado, Mathías Valdez Duffau dio detalles de la causa desde el cementerio.

Por Canal26

Viernes 14 de Marzo de 2008 - 00:00


El crimen de Gastón Duffau sigue dando que hablar. Mathías Valdez Duffau habló en exclusiva con Canal 26 para dar los nuevos detalles de la investigación de la muerte de su primo y defendido.

“Hoy la policía bonaerense se encuentra con seis efectivos exonerados, detenidos y otros tres suspendidos. Lamentamos nosotros que en toda la cadena de encubrimiento, que ya son 15 policías que estamos solicitando al gobernador Scioli que, automáticamente se exoneren no para este caso que es Gastón Duffau sino para cualquier caso”, dijo.

“Hay una sola morgue que no depende de la policía Bonaerense en toda la Provincia... esa morgue es la que estableció ya que Gastón murió de asfixia, que Gastón fue producto de una tortura y muerte en manos de la Provincia de Buenos Aires, eso es pena de muerte en la Provincia...”, sentenció el abogado.

Este viernes, y después de varias semanas, la familia de Gastón podrá despedir los restos del joven. “Hoy reconocimos el cuerpo de tres semanas, con dos autopsias, totalmente destruido, completamente violáceo, amoretonado y hoy vamos a darle un poco de paz a la familia”, dijo el abogado antes de que su primo sea enterrado en el Cementerio Colonial.

Valdez Duffau aseguró a Canal 26 que este sea un “caso testigo” porque “las pautas son claras, con muchos otros hechos en los cuales la policía interviene, brinda una interpretación autoconvincente de los hechos, encubridora y hace que la familia dude de la verdad... y después de años se dan cuenta de la mentira pero el cuerpo está desintegrado”.

Gastón Duffau apareció muerto a bordo de un patrullero en la localidad bonaerense de Ramos Mejía. El joven estaba boca abajo en la caja de una camioneta policial, semidesnudo, con los pies atados y con doble juego de esposas en sus manos. Su familia sigue luchando para encontrar Justicia.