Fiesta en Olivos: el Gobierno reconoce que hay fotos y videos fuera de su control y quiere cerrar el tema

Fiesta de cumpleaños en Olivos. Alberto Fernández.

La aparición -escándalo mediante- de las fotos y videos del cumpleaños de la Primera Dama Fabiola Yáñez en la Quinta de Olivos junto al presidente argentino Alberto Fernández y varios conocidos sin distanciamiento ni protección en plena etapa de aislamiento preventivo y obligatorio por coronavirus, ha sido un disparo que dio directo sobre la línea de flotación del Gobierno.

La Administración gubernamental de Fernández, y su credibilidad y autoridad, quedó seriamente dañada, y con ese marco es que ahora se busca minimizar los efectos de los hechos y, sobre todo, ejercer un complicado (cuando no imposible) "control de daños".

Pero claro que ese "control de daños" era posible en otros tiempos, en los que no existían las redes sociales y cuando se podía ejercer un efectivo seguimiento sobre el estado de cosas con tan solo declamarlo. Ahora, en cambio, todo es muy diferentes.

Así, el Gobierno admite que las fotos y los videos sobre las reuniones sociales en Olivos están absolutamente fuera de su control, pese a lo cual pretenden dar por terminada la urticante e incómoda cuestión, principalmente en la antesala de las próximas elecciones.

A medida que todo se ha ido de las manos, desde el entorno del presidente buscan poner paños fríos y aseguran (tal como se expresa en una nota de La Nación a cargo de Jaime Rosemberg) que “Alberto ya habló dos veces del tema, no hay mucho más para decir”.

Y claro que más allá de las intenciones del primer mandatario de hacer borrón y cuenta nueva, desde su entorno le aclaran que resultará “imposible” garantizar que no sigan apareciendo públicamente más imágenes similares.

Otro de los encargados de urgencia para que apague el incendio ha sido el abogado Juan Pablo Fioribello, el letrado que representa ante la Justicia a casi todos los asistentes a la reunión en Olivos, una causa que presentó el fiscal Ramiro González ante el juez federal Sebastián Casanello por violación de los artículos 205 y 239 del código penal, aplicables a la cuarentena.

Tal como ha informado La Nación, a fuentes relacionadas a quienes estuvieron al tanto del estado de cosas, “desde ese estudio se les pidió a todos que le dijeran a quienes le dieron las fotos”.

Como sea, a esta altura de las circunstancias la bola de nieve crece y es imparable, lo cual preocupa sobre manera al Gobierno Nacional, que sabe que quedó en "off side" con gran parte de la sociedad argentina.