Movimientos Sociales promueven plan de lucha para frenar el ajuste y el saqueo

En los últimos meses se ha profundizado aún más la pérdida de poder adquisitivo del salario y los programas sociales; la estrategia del gobierno es dejarlos congelados, y esperar a que la inflación termine de erosionar los mínimos ingresos que recibimos que nos ubican a millones por debajo de la línea de indigencia. Buscan de esta manera “bajar los costos laborales” y “reducir el gasto público”. Para nosotros implica el deterioro de nuestras condiciones de vida y la imposibilidad de alcanzar la mera subsistencia. El aumento de tarifas de servicios esenciales a niveles impagables, los despidos en el Estado, el cierre de fábricas, y el hambre que se hace cada vez más presente a lo largo y ancho del país, tienen como contrapartida la garantía para diversas fracciones del empresariado para continuar obteniendo descomunales ganancias.

Junto con ello el acuerdo con el FMI y el fenomenal endeudamiento, ubica al país en las puertas de una crisis social y política de envergadura, con graves consecuencias sobre las mayorías populares.

El gobierno nacional y los gobiernos provinciales pretenden avanzar con el plan de ajuste reprimiendo. Esto quedó demostrado durante las jornadas del 14 y 18 de diciembre donde las clases dominantes votaron la reforma previsional con el Congreso vallado y con la policía reprimiendo ferozmente. Recientemente, el Estado reprimió una medida de protesta de los más de 500 trabajadores despedidos del Ministerio de Agroindustria y de astilleros Rio Santiago. La fórmula es clara: el ajuste cierra con represión. Nuestra respuesta debe ser unitaria, inmediata y contundente: resistir el ajuste, frenar la represión y avanzar en el reclamo de nuestras justas y legítimas reivindicaciones.

La unidad de todos los sectores afectados por el plan de ajuste es indispensable: trabajadores ocupados, precarizados y desocupados. El Plan de Lucha que comienza la próxima semana tendrá como consigna central “Fuera el FMI. Basta de Hambre” y convocará a más de un centenar de organizaciones sociales a lo largo y ancho del país.

Miércoles 5 de septiembre:
A las 14 hs. Asamblea Nacional de Delegados para anunciar el plan de acción de los movimientos sociales frente a la crisis que atraviesa el país.

Jueves 6 de septiembre:
Movilización a la ANSES Central y sus representaciones en todas las provincias para exigir el aumento de emergencia para la AUH, las jubilaciones y pensiones mínimas y de todos los programas de empleo.

Miércoles 12 de septiembre:
1000 Ollas Populares sobre la 9 de Julio y Av. de Mayo para reclamar el tratamiento urgente de las 5 leyes que impulsa el sector: Emergencia Alimentaria, Infraestructura Social, Agricultura Familiar, Integración Urbana y Emergencia en Adicciones.

Miércoles 19 de septiembre:
Movilización al Ministerio de Energía y a las empresas de servicios para solicitar retrotraer las tarifas a diciembre de 2015 y también para pedir la ampliación de la tarifa social para el sector precarizado.

Martes 25 de septiembre:
Adhesión y participación al Paro General para confluir junto con el movimiento obrero, garantizando la jornada con piquetes en todas las rutas del país.

(Foto: NA)