Un alimento que casi todos consumimos aumenta el riesgo demencia, según Harvard: cuál es y por qué

Se estima que para 2030 los casos de demencia alcanzarán los 78 millones de personas, lo que resalta la importancia de adoptar hábitos para cuidar el cerebro y la memoria, y la alimentación juega un papel clave en ello.

Por Canal26

Lunes 10 de Febrero de 2025 - 21:50

Carnes rojas. Foto Unsplash Un alimento que casi todos consumimos aumenta el riesgo demencia. Foto Unsplash

Cada vez hay más evidencia sobre estrecha relación entre la alimentación y la salud cerebral gracias a las diversas investigaciones realizadas en el campo. En ese contexto, está claro que los alimentos que consumimos no solo impactan en el organismo, sino que también tienen efectos en la función cognitiva y en la memoria.

Con el paso del tiempo, la población mundial envejece y se hacen más urgentes las acciones para combatir la demencia y el Alzheimer. Se calcula que para 2030, los casos de demencia aumentarán a 78 millones de personas, por lo que es importante buscar maneras de cuidar el cerebro y la memoria, y para eso es importante evitar un alimento que casi todos consumen.

Hipertensión. Foto: Unsplash

Te puede interesar:

Tratar la hipertensión a tiempo podría reducir el riesgo de deterioro cognitivo y demencia, según un estudio

Harvard: este es el alimento que aumenta el deterioro cognitivo

Un nuevo estudio realizado por investigadores del Mass General Brighman, la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard y el Instituto Broad del MIT y Harvard encontró que comer mayores cantidades de carne roja, sobre todo carnes procesadas, aumenta el riesgo de demencia.

Carnes rojas. Foto Unsplash Las carnes rojas podrían afectar la salud cognitiva. Foto Unsplash

Para eso, los investigadores usaron datos de 133.771 personas libres de demencia al inicio del estudio, de las cuales, 11.173 fueron diagnosticadas con esta afección hasta 43 años después. Los datos se extrajeron del Estudio de Salud de Enfermeras (NHS) y el Estudio de Seguimiento de Profesionales de la Salud (HPFS).

En comparación con quienes consumen una cantidad mínima de carne procesada, los investigadores establecieron que, los que consumían un cuarto o más de ración de carnes procesadas al día tenían un riesgo 13% mayor de desarrollar demencia y 14% mayor de deterioro cognitivo.

Para entender mejor, un promedio diario de un cuarto o más de una ración de carnes rojas procesadas, es aproximadamente dos fetas de panceta, una feta y media de mortadela o un pancho, precisa un comunicado de Mass General Brighman.

Carnes rojas. Foto Unsplash Se recomienda disminuir el consumo de carnes rojas. Foto Unsplash

A su vez, descubrieron que “un mayor consumo de carne roja procesada se asoció con un envejecimiento acelerado en la cognición global y en la memoria verbal”.

Los investigadores también encontraron que, reemplazar la carne roja procesada por otras fuentes de proteínas, como frutos secos y legumbres, puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar demencia en aproximadamente un 20% y se relaciona con 1,37 años menos de envejecimiento cognitivo.

Carnes rojas. Foto Unsplash Las consecuencias de consumir carnes rojas. Foto Unsplash

Demi Moore junto a Bruce Willis. Foto: Instagram/demimoore

Te puede interesar:

Demi Moore habló sobre la salud de Bruce Willis y se mostró devastada: "Es una gran pérdida"

Las consecuencias de consumir carnes rojas

Las carnes rojas provenientes de animales como de res, la oveja, el carnero, ternera, venado, cabra y el puerco pueden causar diversos problemas de salud, entre los que se destacan las enfermedades cardíacas. En ese sentido, los especialistas de la salud dieron razones por las que se recomienda disminuir el consumo de carnes rojas:

  • Aumenta el riesgo de enfermedades cardíacas: aumentan el riesgo de padecer enfermedades cardíacas, afectan el funcionamiento del corazón, favorecen el aumento del colesterol y elevan la presión arterial. 
  • Incrementa el riesgo de padecer cáncer: aumenta el riesgo de padecer cáncer de colon, principalmente, pero también la relacionaron con otros tipos de cánceres como el de estómago, faringe, mama y próstata. Este tipo de carne aumenta la inflamación en el intestino, principalmente las carnes rojas procesadas, como tocino, salchicha y chorizo, favoreciendo alteraciones en las células que pueden favorecer la aparición del cáncer.
  • Aumenta la acidez: se cree que esto podría causar daño en los tejidos, que a su vez iniciaría un proceso inflamatorio, ocasionando diversas consecuencias para la salud.
  • Causan infecciones intestinales: el uso frecuente de antibióticos en los animales puede estimular la aparición de bacterias más resistentes en ellos, que luego de ser sacrificados y procesados para la alimentación, estas bacterias pueden contaminar la carne u otros productos animales, aumentando el riesgo de ocasionar una infección intestinal en los humanos con este tipo de microorganismos resistentes a los antibióticos.

Carnes rojas. Foto Unsplash Carnes rojas. Foto Unsplash

Los tipos de dieta y su influencia en el desarrollo del Alzheimer. Foto: Unsplash.

Te puede interesar:

Alzheimer: las tres preguntas clave que pueden ayudar a detectar precozmente la enfermedad

Otros alimentos a los que hay que prestar atención

Sin embargo, también existen otros alimentos que podrían tener efectos adversos en el cerebro. Uma Naidoo, psiquiatra nutricional e investigadora de neurociencias en la Escuela de Medicina de Harvard, determinó que las frituras y los productos con altos niveles de azúcar son los culpables de la niebla mental y el deterioro cognitivo.

A su vez, agrega que no incluir estos alimentos en las dietas puede contribuir a preservar la salud mental y tener efectos positivos en la prevención de enfermedades neurodegenerativas:

  • Alimentos ultraprocesados: las gaseosas, papas fritas, helados y pizzas tienen consecuencias negativas para la salud. Estos alimentos suelen contener altas cantidades de grasas añadidas, sal y azúcar, mientras son pobres en proteínas y fibra.
  • Azúcares: pueden afectar negativamente el hipocampo, la región del cerebro responsable de gestionar la memoria y la plasticidad cognitiva. La Asociación Estadounidense del Corazón sugiere que las mujeres no deben consumir más de 25 gramos de azúcar al día, mientras que el límite para los hombres es de 36 gramos. 
  • Edulcorantes artificiales: la sacarina o la estevia tampoco aportan valor nutricional y pueden perjudicar la memoria si se consumen en exceso.
  • Alcohol: otro factor de riesgo significativo para la pérdida de memoria y el desarrollo de enfermedades neurológicas, incluida la demencia. Esta bebida puede dañar las neuronas y afectar directamente las capacidades cognitivas.