La familia Djokovic aseguró que Novak está prisionero y que quieren “crucificarlo” como a Jesús

Novak Djokovic. Foto: NA.

Los abogados del tenista Novak Djokovic lograron este jueves frenar el proceso de deportación iniciado por las autoridades de Australia por haber incumplido los requisitos de entrada al país al no quererse vacunar contra el coronavirus y el próximo lunes se llevará a cabo una audiencia en los juzgados de Melbourne para tomar una decisión definitiva.

El deportista serbio número uno del mundo fue trasladado al Park Hotel de la mencionada ciudad donde deberá permanecer en cuarentena a la espera de una resolución, tras haber estado retenido durante varias horas en el aeropuerto de Tullamarine debido a supuestas irregularidades con la documentación migratoria y la exención sanitaria.

La familia de Novak Djokovic brindó este jueves una conferencia de prensa en Belgrado, la capital de Serbia, para cuestionar la manera en que el tenista está siendo tratado por el gobierno australiano luego de que le fuera denegada la Visa de ingreso al país.

Djokovic se declaró abiertamente en contra de vacunarse contra el coronavirus en abril de 2020 y ya cursó la enfermedad. Al llegar a Melbourne fue retenido durante ocho horas por las autoridades migratorias de Australia y le negaron la Visa de ingreso que le había dado el gobierno de Vitoria y Australia Tennis para que pudiera participar del primer Grand Slam de la temporada.

“Novak lleva 20 años demostrando que es parte del mundo liberal. Jesús fue crucificado y le hicieron de todo, y luego aguantó y sigue vivo entre nosotros. Están tratando de crucificar a Novak de la misma manera que a Jesús y hacerle de todo. Novak es el mejor hombre y atleta del mundo. Él resistirá, como nosotros hemos soportado. Novak luchará como lo hicimos nosotros y los serbios con todos los Balcanes”, aseguró el papá.

“Novak fue enviado a prisión. No está detenido, sino en prisión. Le quitaron todo menos el teléfono, no puede lavarse ni cambiarse. Es un prisionero de esos cabrones, la vergüenza. Todo el mundo libertario, levántese, porque esta no es solo una lucha entre Serbia y Novak, esta es una lucha de siete mil millones de personas en el mundo por la libertad de expresión y opinión. Novak no violó ninguna ley. Novak, todos estamos contigo", agregó.

“Es muy difícil para mí pasar por esto. Nadie se merecía este tipo de trato, y menos él. Esta es una posición política, que no puede jugar, es un escándalo. Colocarlo en hoteles sucios, no tener contacto con nosotros, es un trato inédito”, consideró la mamá.