El club de la ribera colocó en el círculo central un cartel redondo con el escudo "xeneize" y la inscripción "Bienvenido Diego", mientras miles de hinchas cantaban por quien fue jugador de la institución en dos etapas, 1981-82 y 1995-97.
Cuando el reloj marcaba las 20.27, Maradona se asomó por el túnel utilizado por los equipos visitantes, a paso lento y acompañado por la persona de seguridad del "Lobo" que lo sigue a todos lados.
Tras avanzar algunos metros, "Pelusa" se dio vuelta hacia la tribuna popular que da a Casa Amarilla y levantó un brazo para saludar a "La 12".
Luego se dirigió a la mitad de la cancha, donde lo esperaban dos ex compañeros de su primera etapa con la camiseta azul y oro, Miguel Ángel Brindisi y el "Mono" Omar Perotti, los tres campeones bajo la conducción técnica de Silvio Marzolini.
De esta manera, el club resolvió que ningún dirigente participe del homenaje, buscando evitar rispideces, ya que Maradona había sido muy duro en sus declaraciones contra Jorge Amor Ameal y Mario Pergolini, presidente y vice boquenses.
Brindisi y Perotti le entregaron a Maradona una plaqueta y una camiseta con el número 10 y el apellido de "Pelusa", quien los abrazó emocionado.
Luego, Tevez se acercó al banco del Lobo y saludó a Maradona con un piquito que fue retratado por la televisión.