San Martín de Tucumán y San Lorenzo cerraron el torneo con un pobre empate

San Lorenzo empató 0-0 ante San Martín de Tucumán, equipo que ya descendió a la Primera B Nacional, en el partido con el cual comenzará la vigésima quinta y última fecha de la Superliga. 

 
Sin demasiadas motivaciones debido a que el local ya había perdido la categoría hace unas fechas y el "Ciclón" apunta a su próximo compromiso por la Copa Libertadores, el desarrollo se fue consumiendo en la más absoluta intrascendencia, siendo el marcador en blanco el resultado más acorde a tamaña pobreza futbolística.
  

A pesar de la pérdida de categoría, el público local acudió en gran número procurando darle un marco decoroso al regreso del "Ciruja" a la B Nacional. El hoy sosegado Ricardo Caruso Lombardi intentó darle identidad a su formación de cara a la "Copa de la Liga" probando algunos nombres que se hallaban relegados en la consideración de sus antecesores en el cargo.
  

A todo esto el técnico Almirón reservó a varios titulares de cara al partido que su equipo disputará el martes venidero ante Melgar de Perú en el Nuevo Gasómetro, por lo que era absolutamente previsible el por demás soporífero trámite que tuvo el cotejo.
  

Dentro de la mediocridad general fue el dueño de casa el que tuvo mayor predisposición a atacar y producto de un ligero predominio generó una clara llegada que debió haber terminado con la sanción de la pena máxima, luego que Gabriel Rojas, a los 13 minutos de la etapa inicial, le cometiera una clara infracción a Petryk en el área, que el árbitro Dóvalo pasó increíblemente por alto.
  

Antes y después de dicha circunstancia ambos elencos se prestaron el balón y generaron escaso peligro para los casi inadvertidos Pedro Fernández y Torrico, en medio de un desarrollo que se asemejó a un entrenamiento formal.
  

Para agregarle algo más de aburrimiento al contexto descripto, el juez del partido debió interrumpir el mismo durante unos minutos promediando el complemento debido a que algunos simpatizantes locales se treparon al alambrado, demora que derivó en un encriptado pedido de clemencia en los minutos finales para que se termine cuanto antes semejante despropósito.
  

Empero, se notó por parte del público local cierta empatía con sus representantes en cancha de acuerdo a los cánticos con los que despidió a sus jugadores, dándose por sentado que San Martín puso hoy mismo en marcha el operativo retorno, seguramente sin Caruso Lombardi en el banco en la próxima temporada en el ascenso.
  

En cuanto a la visita, la postrera expulsión de su entrenador a raíz de una airada protesta no hizo más que radiografiar a un hombre que después de varias decepciones no termina de redondear una recuperación sostenida que convierta en más confiable a su estrategia.