Bonos de la deuda argentina: ya rinden 27% y están entre los más riesgosos del mundo

Alberto Fernández y Martín Guzman.

En lo que va del 2022, los bonos Globales registraron la décima sesión consecutiva en baja. Es decir que perdieron valor en cada una de las ruedas operativas de este año recién estrenado, para acumular una baja promedio en rango del 10 al 11 por ciento.

“La deuda hard dollar argentina no encuentra piso de la mano de las discrepancias con el FMI, que alejan a los pocos inversores que aún tienen alguna posición en bonos nacionales. Además no existió reinversión de los cupones recientemente pagados”, dijo la consultora Delphos Investment en una entrevista con Infobae.

Agregó que “los bancos del exterior que aún cubren Argentina parecen empezar a comprar el escenario de un ‘no’ acuerdo con el FMI, y con ello el malhumor parece crecer. Nosotros aún asignamos una probabilidad del 65/70% a un acuerdo sobre la hora, el cual por otro lado no serviría para mucho más que descomprimir algo de este estrés financiero y mejorar un poco la reputación”.

Claves detrás de la desconfianza de los inversores: 

La primera es la lenta negociación con el FMI. Gabriela Cerruti, vocera presidencial, afirmó: “Argentina ya presentó su propuesta y está en manos del Fondo Monetario ahora tratar de dar la respuesta lo más rápido”.

La otra razón es que el déficit no cede, la mayor diferencia entre Argentina y el FMI está en cómo achicar el déficit fiscal, ya que el organismo multilateral pretende que sea mediante un ajuste notorio y el Gobierno -que se opone a esa alternativa- busca que sea en base al crecimiento con mayor recaudación.

La inflación en ascenso hace que los negocios permanezcan condicionados. En 2021 el porcentaje fue de 50,9%, por encima de lo previsto por los analistas. Otro aspecto fundamental es la disponibilidad inmediata de divisas para afrontar pagos de deuda. Las reservas netas del Banco Central son casi nulas, el BCRA no tiene dólares líquidos.

La ausencia de plan económico es otro factor que condiciona, está previsto que el Gobierno convoque a sesiones extraordinarias en el Congreso para la última semana de enero, no está claro si se incorporará al temario un eventual acuerdo con el Fondo. 

A su vez, el pesimismo en el exterior crece cada vez más y hay dudas sobre el crecimiento económico. La actividad financiera se moviliza en medio de otros dos grandes condicionantes para la economía local: una histórica ola de calor con cortes de energía en gran parte del país y una galopante tercera ola de coronavirus. La sequía en el campo es otro punto que impacta, un informe de la Bolsa de Cereales de Rosario indicó que la sequía 2021/22 les costará a los productores agropecuarios USD 2.930 millones.

Por su parte, el ministro de Economía, Martín Guzmán, y el canciller, Santiago Cafiero, definieron los detalles de la propuesta argentina al Fondo Monetario Internacional (FMI) que le será presentada al gobierno de los Estados Unidos en busca de apoyo. Cafiero se reunirá el martes con el secretario del Departamento de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, en Washington.

“No sabemos cuál es la posición de Estados Unidos porque nunca se le presentó formalmente la propuesta al board”, señaló esta semana el presidente Alberto Fernández, al ser consultado sobre la falta de respaldo internacional a la posición argentina. La semana pasada el gobierno blanqueó las diferencias que mantiene con el organismo para lograr un acuerdo para la renegociación de USD45.000 millones otorgados a la administración de Mauricio Macri.