Elevan a juicio la causa contra organizadores de fiesta electrónica en la que murió un joven que consumió éxtasis

Fiesta electrónica

El fiscal Carlos María Cornejo elevó a juicio la causa por drogas contra los organizadores de una fiesta electrónica clandestina realizada en octubre de 2019 en Córdoba y en la que murió un joven tras consumir éxtasis.

Así, Alejandro César Aguirre, Ricardo Marconi y Gonzalo Ortiz, los organizadores del evento, llegarán a juicio detenidos e imputados como coautores de los delitos de facilitación de un lugar para que concurran personas con el objeto de usar estupefacientes triplemente agravado por ser en perjuicio de menores de 18 años de edad; por la intervención de tres personas de manera organizada; y por haberse realizado en un sitio en donde se llevó a cabo un espectáculo público.

En tanto, el otro imputado, Ariel Antonio Carlettini, quien supuestamente debía brindar asistencia médica a los concurrentes, fue imputado por el mismo delito pero en calidad de partícipe necesario.

La causa fue elevada a juicio por la Fiscalía del Fuero de Lucha contra el Narcotráfico, que investigó la muerte de Samir Andrés Velázquez, de 20 años, quien falleció durante la fiesta realizada en una quinta ubicada en el Camino 60 cuadras de Córdoba, el que conecta a la zona urbana de la ciudad capital con zonas suburbanas.

El evento fue organizado por las productoras Peca2 y Journey, que funcionaban de manera ilegal al no contar con las correspondientes habilitaciones.

Durante el evento, Samir Velázquez sufrió una descompostura, se desvaneció y fue asistido en el lugar por el supuesto servicio médico contratado por los organizadores.

Al no reaccionar, Velázquez fue trasladado hasta el Hospital Florencio Díaz en donde momentos después se constató su deceso.

Los organizadores también están siendo investigados por la muerte del joven Velázquez, en la causa en la que fueron imputados como supuestos autores del delito de homicidio culposo.