Noche de inseguridad para colectivos: tres vehículos sufrieron ataques o robos

Agresión a un colectivo de la línea 57. Foto: Twitter.

Tras la muerte de Daniel Barrientos mientras trabajaba en el colectivo 620, quedó expuesta la inseguridad en los colectivos. En las últimas horas, hubo una serie de eventos de delincuencia en tres micros diferentes que pusieron en alerta nuevamente a las empresas de transporte.

La primera de ellas tuvo lugar en la medianoche, donde un chofer de la 23, de la empresa La Perlita de Moreno, fue atacado por dos delincuentes para robarle y agredirlo. El hecho ocurrió en la localidad de Cuartel V, el límite entre Moreno y José C. Paz. "Cuando se fueron le pegaron un culatazo en la cara y le cortaron el rostro. El les había entregado todo, hasta las zapatillas le robaron", expresó uno de sus compañeros.

Ataque a un colectivo 57. Video: Twitter.

Unas horas más tarde, un colectivero que manejaba la línea 57 de Camino del Buen Ayre también sufrió la inseguridad, aunque fue diferente a su colega. El vehículo fue atacado a piedrazos por tercera vez en pocos días. La agresión fue en General Rodríguez y los trabajadores aseguran que atacan de esa manera para que la unidad frene y sea asaltada.

El último de los hechos registrados en la madrugada fue en el barrio Ejército de Los Andres, parte de Ciudadela. Un grupo de ladrones tomó un coche de la línea 161 y asaltaron a los presentes, además de que le dieron un culatazo al chofer, quien fue herido en su cabeza.

Otro robo en un colectivo. Fue en la línea 161 en el cruce de las calles República Árabe Siria y Besares,en Ciudadela.
Dos delincuentes armados robaron a los pasajeros, uno resultó herido.El colectivero paró en la cabina de Gendarmeria. pic.twitter.com/Z2DjYTkMTW

— Ignacio González Prieto (@igonzalezprieto) April 12, 2023

Tras lo ocurrido en la madrugada del miércoles, la empresa La Perlita se encuentra de paro. Esta medida se sumó a la medida de fuerza de interrumpir su servicio de los colectivos de Metropol por 24 horas. Por otro lado, la 161 no adoptó medidas pese al ataque que sufrió uno de sus trabajadores.