Conflictos del mundo actual, el uso de la Inteligencia Artificial y problemáticas ambientales marcaron la agenda de la cumbre en Davos. El debut internacional del presidente argentino, Javier Milei, fue uno de los focos de atención del encuentro.
Esta semana empezó en la localidad suiza de Davos, una nueva cumbre del Foro Económico Mundial, un espacio que congrega cada año a varios de los políticos, diplomáticos, científicos, empresarios y personalidades más famosas del mundo.
A diferencia de otras cumbres, ésta generó altas expectativas por múltiples razones: la posibilidad de que Suiza pueda acoger futuras reuniones de paz entre Ucrania y Rusia; el enigmático mensaje que China tenía para la comunidad internacional y, por supuesto, los mensajes de distintos líderes del mundo, entre ellos, el recientemente asumido, Javier Milei.
Te puede interesar:
Elon Musk y su curioso tuit sobre Javier Milei durante su discurso en el Foro de Davos
Casi de manera inaugural, uno de los primeros líderes de Estado en dirigirse al foro de Davos fue el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, quién manifestó su entusiasmo en que Suiza se haya ofrecido como espacio neutral para posibles negociaciones de paz, en un futuro. Zelenski evitó hablar de cuándo serían esas reuniones, o de si Rusia ha sido consultada, pero el mandatario ucraniano manifestó su deseo de que China (hoy aliado de Moscú) forme parte de las delegaciones de paz.
Te puede interesar:
Cumbre de Davos: países del Este afirmaron que el futuro de Ucrania está en la Unión Europea, pero "Rusia debe ser derrotada"
Pero si Ucrania era tema del plenario en Davos, la situación en Gaza no figuraba en el temario. Sin embargo, hacia allí se posaron entonces todas las luces el martes 16 de enero, cuando el canciller saudí, Faisal bin Farhad al Saud, expresó en el plenario de Davos que Arabia Saudita no reconocería a Israel como Estado, a menos no hasta que Israel reconozca un Estado palestino oficial bajo la Autoridad Nacional Palestina.
El condicionamiento saudí sorprendió a muchos en la sala por varias razones: el tema Gaza no estaba en la agenda del foro, aunque lo más impactante fue que las negociaciones que Estados Unidos venía encabezando para tratar de concretar un histórico reconocimiento mutuo entre el Reino de Arabia Saudita e Israel, parecen haberse caído en su totalidad. Arabia Saudita utilizó su espacio en Davos para mostrar su propia agenda, síntoma de estos tiempos de descentralización global que atravesamos.
Te puede interesar:
Primer ministro de Grecia pidió que Israel que "no cree una nueva generación de huérfanos" en Gaza
En Davos habían altas expectativas sobre una declaración “importante” que China pronosticó para su participación en el foro. Y estuvo a la altura.
La presencia de China en Davos quedó a cargo del primer ministro, Li Qiang, quién disertó también el martes. Li Qiang puso el eje discursivo sobre una problemática del futuro, pero también del presente: la Inteligencia Artificial.
El premier chino comenzó su discurso planteando la necesidad de que el foro y otros organismos empiecen a darse los espacios de discusión sobre la necesidad de imponer límites éticos a la inteligencia artificial. Qiang fue muy claro con una frase: “Necesitamos personas manejando máquinas, no máquinas manejando a personas”.
El discurso se sintió como un guiño de Beijing a la Unión Europea, que ya inició una campaña para intentar contener el avance desmedido de las IA.
De esa manera, China abrió las puertas a un abordaje conjunto de algo que ya empieza a preocupar a numerosos expertos y gobiernos del mundo. China y la UE han dado muestras claras de querer avanzar en ese tema y abrieron la invitación a Estados Unidos para que se sume a un eje de debate del “futuro”, de un futuro que ya está con nosotros.
Te puede interesar:
Foro de Davos: Herzog planteó una coalición internacional para reconstruir Gaza tras la guerra
Si de altas expectativas hablamos, la presencia del presidente argentino, Javier Milei, despertaba un notable interés sobre todo en el empresariado global. El disruptivo pero pro-mercado presidente argentino se convirtió en una de las principales atracciones del tercer día de la cumbre.
El discurso de Milei, de poco menos de media hora, se podría dividir en dos partes: un recorrido historicista del capitalismo como sistema mundial y una feroz crítica a la agenda neomarxista -citando textualmente al propio presidente Milei- por poner en peligro al mundo occidental.
Sobre la crítica a la agenda neomarxista pueden extraerse algunas lecturas. Con Bolsonaro aún lejos del poder en Brasil y con Trump encarando su campaña presidencial en Estados Unidos, el presidente argentino parece querer convertirse en una de las caras más gravitantes de las derechas actuales, fundamentalmente las que denuncian una permanente infiltración de las izquierdas en foros y espacios del mundo occidental.
Davos es, en pocas palabras, una vidriera al mundo. Los dirigentes que allí se presentan exponen sus preocupaciones y sus programas pero, fundamentalmente, sus intereses. En este caso, así como Arabia Saudita buscó instalar un tema de su región; o China buscó primerear en el debate sobre las IA; Milei, en su acto inaugural frente al Foro, intentó posicionarse como una cara visible de las derechas con mayor ideologización frente a la agenda global.
1
Rusia-Ucrania, a las puertas de una Tercera Guerra Mundial y nuclear
2
"Ignoraron las advertencias de Putin": el Kremlin justificó el lanzamiento del misil hipersónico contra Ucrania
3
Desde un "portaaviones" aéreo hasta buques no tripulados: China mostró sus nuevas armas de alta tecnología
4
Rusia advirtió a Corea del Sur sobre el suministro de armamento letal a Ucrania: "Destruirá nuestras relaciones"
5
Sin un nuevo acuerdo de paz a la vista, se cumple un año de la tregua de Israel y Hamás en Gaza