Elecciones en los Estados Unidos: voto a voto, incertidumbre y alta participación

TRUMP VS BIDEN. REUTERS

POR MANUEL CASTRO

No cabe duda que no ha sido una votación más. Han sido las elecciones más duras de los últimos veinte años. Una sociedad dividida, tal vez más de lo que nosotros desde Argentina podamos ver. Personas, y hablo de ciudadanos comunes, entrevistadas en distintos medios de habla inglesa señalaron que nunca habían visto tanta animosidad. A tal punto que con sus amistades se manejaban con cautela. Es terrible, se habla de libertad y no se tolera la opinión del otro.

Otro dato, nunca hubo tanta participación ciudadana. Pero las diferencias son mínimas y se ganará por la mínima.

Pero no solo es importante la presidencia del país, sino también el Congreso. Es muy probable que la Cámara de Representantes quede en manos demócratas, y el Senado en manos de republicanos… y la Corte Suprema también con jueces de pensamiento conservador. Aunque existe la independencia, y no siempre los conservadores han votado como tales.

TRUMP VS BIDEN. REUTERS 

Trump se declaró vencedor, está tranquilo con sus victorias en La Florida, Ohio y Tejas. Biden maneja la cautela, aunque ganó en Arizona, un estado que jamás fue demócrata; y que le permitirá sumar electores si lograra un par de victorias más en estados cruciales, y con ellos la presidencia. De todas formas el equipo de abogados de Biden está listo para actuar llegado el caso. Los de Trump también.

Hablando de esos estados, en ellos está el verdadero campo de batalla: Pensilvania, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Wisconsin, Georgia y Alaska.

Hasta ahora Donald Trump lleva ventaja, claro, falta que llegue el voto que se envió por correo. Ese voto se aceptará y se contará si se recibe hasta el día viernes.

Así es que habrá que esperar por lo menos unos tres días.

TRUMP VS BIDEN. REUTERS 

No quiero dejar de pasar por alto las medidas de seguridad y las manifestaciones violentas fogoneadas por sectores globalistas y que son, obviamente, anti Trump.

En la campaña ha habido de todo. Los medios de comunicación fueron verdaderas usinas de propaganda demócrata, otras, las menos, republicanas; las encuestas también lo eran, y los medios electrónicos alternativos, que no solo tomaron partido (que no está nada mal) sino que boicotearon a todo aquel que no apoyara a Biden o hablara de los negociados de Hunter Biden. Se supone que en las redes se debe manejar absoluta libertad. Se supone.

Más allá de las elecciones, que para nada es un tema menor, se juega mucho más, es un tablero donde los factores de poder están buscando prevalecer. Es el globalismo o la patria. Y en esto no habrá empate.