Según expertos, lo que comemos contamina tanto como los residuos que desechamos

Alimentos sostenibles. Foto: Unsplash

No solo el uso de materiales plásticos, vehículos o elementos desechables perjudican al medio ambiente, sino también la forma de alimentarnos ya que la cadena alimentaria del mundo globalizado que provoca la sobreexplotación del campo y el mar también genera una gran huella de carbono que agudiza al cambio climático.

Esta huella de carbono puede reducirse cambiando la forma de alimentarse a una más saludable. Según la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la crisis de acceso a la alimentación es el cuarto riesgo global en la percepción ciudadana en 2023 dado a que cada vez es más difícil el acceso a los alimentos, lo que genera que cada vez más personas pasen hambre.

Alimentos. Foto: Reuters.

Heinz Wurth, chef chileno y experto en divulgación científica; Juan Martin Bermúdez, coordinador de I+D y Medio Ambiente en Aponiente, y Oriol Vilaseca, experto en sostenibilidad y gestión de residuos, intentan responder de qué manera afectará el cambio climático a la gastronomía, sí es necesario volver a la cocina tradicional y sí las algas y los insectos pueden ser las fuentes de alimentos del futuro dado que su reproducción es menos contaminante.

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Los insectos y algas en el centro de la cuestión

El chef Wurth afirma que el reto del comer insectos en vez de animales se encuentra en la forma de cocinarlo, ya que prepararlos de manera apetitosa y atractiva es lo más difícil de lograr, pero el punto importante es lograr empoderar a las cocinas de la producción de pesca, ganadería o cultivo sostenible y rechazar lo que no lo es.

De todas formas, la dificultad de cocinarlos queda en un segundo plano cuando se trata del consumo dado que "a buena parte del mundo occidental les dan asco", según el chef chileno, aunque en varios países del mundo su consumo es habitual.

Insectos. Foto: Unsplash.

En relación a las algas, Evarist March, colaborador botánico del Celler de Can Roca, remarcó que las nuevas plantas y vegetales pasarán a ser las protagonistas de la dieta del futuro, tratándose de alimentos capaces de crecer y cultivarse con las nuevas temporadas.

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Alimentos de temporada y a la mano

Aquellos alimentos que son de temporada y de cercanía son las premisas básicas de una nueva alimentación consciente en relación a la crisis ambiental y de suministro. "Pues quizá es que no debemos comer fresas todo el año, ni echar aguacate a las ensaladas cuando en el Mediterráneo no estaban en la receta original, por ejemplo", informó Oriol Vilaseca.

Frutillas. Foto: Unsplash.

Además, el consultor alimentario y medioambiental, adelanto que la producción de frutillas en el sur de España, para el 2050, se reducirá en un 80% como consecuencia del cambio climático y los patrones de la lluvia variantes.