Estados Unidos está camino a cerrar su gobierno: ¿Qué peligros puede traer para los ciudadanos?

Congreso de Estados Unidos. Foto: Reuters.

Estados Unidos está pasando por una importante crisis presupuestaria. El gobierno está camino a cerrar sus puertas a partir de las 00 H del 1 de octubre, cuando comienza el año fiscal, por el fuerte recorte al gasto público impulsado por el Partido Republicano. Los conservadores se oponen a la fuerte toma de deuda por parte del oficialismo demócrata y el presidente Joe Biden, por lo que plantearon serias diferencias en el parlamento en cuanto al presupuesto. 

Kevin McCarthy, líder del bloque parlamentario republicano. Foto: Reuters.

Miles de trabajadores estatales podrían quedar suspendidos y sin cobrar y Washington podría experimentar una fuerte caída en su crecimiento económico. Cuanto más tiempo se mantenga paralizado, mayor será el impacto.

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¿Qué medidas implica un cierre del gobierno de Estados Unidos?

• Se suspende el puesto de trabajo de los trabajadores federales: los empleados estatales que no sean considerados esenciales no van a trabajar y tampoco cobran su salario. El Comité para un Presupuesto Federal Responsable calcula que 850 mil trabajadores se verían afectados. Al alcanzar una financiación entre ambos partidos estadounidenses se podrá lograr que vuelven a sus puestos. Esto podría afectar a más miembros de la población, ya que no se podrán hacer solicitudes de Seguridad Social y Médica o realizar inspecciones de alimentos. 
• Empleados esenciales trabajan sin percibir su sueldo: la Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales (AFGE, por sus siglas en inglés) estima que un cierre total del gobierno implicaría que casi 1,8 millones de trabajadores no contarán con un sueldo durante este período. Entre ellos se  cuenta, por ejemplo, a los miembros del Ejército. 
• Economía: los economistas de Goldman Sachs plantearon que un cierre perjudicaría al crecimiento económico en el cuarto trimestre en 0,2 puntos porcentuales por cada semana que se implemente. Algunos analizan que la paralización se podrá resolver en dos o tres semanas “ya que ninguna de las partes parece dispuesta a hacer concesiones inmediatas”. 
• Falta de datos en la Reserva Federal: es probable que durante el período no se publiquen datos oficiales de la Reserva Federal (FED). Esto podría llevar al Banco Central a tomar decisiones sin información.