¡No lo uses!: el jabón que genera irritación y sequedad en la piel, según una dermatóloga

Jabón blanco. Foto: Unsplash

Los productos que usamos en la ducha tienen un impacto significativo sobre la salud de nuestra piel, muchos de ellos, incluso, son los culpables de la sequedad y la descamación.

Uno de los productos que requiere de especial atención es el jabón, producto que puede llegar a ser dañino para la piel, advierte Merlene Goland, especialista en dermatología clínica.

Hay que tener cuidado con los productos que usamos en la ducha. Foto: Unsplash

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¿Qué jabón es peligroso?

Se trata de el jabón blanco, el cual suele tener una imagen positiva entre los consumidores, quienes creen que se trata de un producto "neutro" y, por ende, saludable.

"El pH del jabón blanco es alcalino, mientras que el pH de nuestra piel es ácido, entre 5.5 y 6", explica Goland.

Jabón blanco tiene un pH alcalino. Foto: Unsplash

Este jabón está diseñado para eliminar la grasa y suciedad de la ropa, por eso su alcalinidad. "Lavar nuestra piel de manera crónica con este tipo de jabones elimina una película protectora en la superficie cutánea, lo que puede llevar a una serie de efectos adversos", alerta la especialista.

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Consecuencias de utilizar jabón blanco

Su uso genera, en primer lugar, deshidratación cutánea, ya que elimina los aceites naturales de la piel, alternando el microbioma cutáneo y aumentando el riesgo de infecciones.

Este jabón genera irritación en la piel. Foto: Unsplash.

El uso de este producto puede provocar irritación en la piel, especialmente en personas con piel sensible o condiciones como la dermatitis o rosácea. Además, empeora ciertas condiciones como el eczema, una inflamación crónica de la piel.

Además, el desequilibrio del pH de la piel puede contribuir al desarrollo del acné, una condición caracterizada por la obstrucción de los poros y la inflamación de la piel.

Se recomienda utilizar jabones cremosos. Foto: Unsplash

Lo ideal es utilizar jabones cremosos o syndet para el cuidado de la piel. Estos suelen ser más suaves y delicados con la piel.

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Expertos de Harvard revelaron cuántas veces hay que bañarse semanalmente para tener una piel saludable

Mantener una adecuada higiene personal es una práctica imprescindible para prevenir infecciones y promover la salud dermatológica. Sin embargo, muchos se preguntan: ¿cuántas veces a la semana deberíamos bañarnos?

Un reciente estudio liderado por el doctor Robert H. Shmerling, editor de Harvard Health Publishing, investigó sobre esta cuestión. Contrario a la creencia popular de que bañarse diariamente es lo más saludable, los resultados sugieren que el exceso de baños puede ser perjudicial para la piel al eliminar los aceites naturales necesarios para su salud.

No hay que bañarse todos los días. Foto: Unsplash.

El contacto con agua y jabón puede empeorar la sequedad de la piel, desencadenando irritación y picazón. Bañarse con demasiada frecuencia puede causar una mayor deshidratación cutánea, llegando incluso a generar grietas que favorecen la entrada de microorganismos, incrementando así el riesgo de infecciones en la piel.

Por estas razones, los expertos sugieren optar por duchas en lugar de baños, ya que exponer la piel a agua caliente, jabón y prolongadas inmersiones puede resultar irritante y contraproducente para la salud de la piel, un riesgo que se incrementa aún más si la práctica se sostiene con el tiempo.

La frecuencia ideal, según este estudio, se sitúa entre 4 y 5 veces por semana. Este intervalo permite mantener una higiene corporal adecuada sin comprometer la salud dermatológica. 

El baño debe ser de corta duración. Foto: Unsplash.

Además de la frecuencia, la duración del baño también es un factor importante a considerar. Se recomienda que una ducha adecuada tenga una duración de entre 3 y 5 minutos.