La "Bioeconomía" señala un programa de cambio avanzado de la época

Fernando Villela, próximo secretario de Agricultura. Foto: Twitter.

Fernando Villela es el próximo secretario de Agricultura. Una de sus decisiones iniciales es cambiar el nombre de la Secretaría y llamarla "Bioeconomía", que lleva a la actividad agroalimentaria a un marco actual. El mismo es el de una profunda integración del sistema a base de la revolución de la técnica, que le da mayor valor a la dimensión biológica de las actividades de producción y conocimiento.

El término Bioeconomía hace referencia a la existencia a nivel mundial de la multiplicidad de cadenas agroindustriales que producen alimentos de base animal y vegetal, además de energía, fibras y bioproductos farmacéuticos. Toda la lista mencionada tiene el punto en común en que captan sistemáticamente dióxido de Carbono de la atmósfera.

Fernando Villela, próximo secretario de Agricultura. Foto: Instagram.

En este contexto, aparece como una respuesta significativa a la crisis climática, que aparece como uno de los desafíos de la época. La agricultura pasa a ser acompañada también por la producción de energía, al punto de crear una industria autónoma como la de los biocombustibles.

El desafío alrededor de Fernando Villela y su equipo está en la oferta, ya que se necesita acelerar el cambio tecnológico y el despliegue de la energía y la creatividad del sector empresarial. La demanda bioeconómica es cada vez es más grande y se centra en los países asiáticos, mientras se diversifica por el empuje de la clase media global. Los países emergentes también tienen un rol importante, ya que disponen de recursos crecientes para lograr una mejora constante de las condiciones de vida y buscan a nivel cultural una "vida sana".

Actualmente, el sistema capitalista atraviesa una 4ta revolución industrial que referencia al proceso de digitalización de las actividades productivas de servicio, fundadas en el respeto irrestricto de la dimensión estrictamente biológica regida por la lógica de la vida. Este factor resulta clave para el desarrollo bioeconómico.

Bioeconomía.

Las tres revoluciones anteriores estuvieron desarrolladas alrededor del criterio de que la naturaleza "es un objeto" de explotación productiva, con el objetivo de transformarla en un insumo dentro de un sistema agroalimentario por definición superintensivo e hiper integrado.

La aparición del cambio climático estuvo en la segunda revolución industrial, aquella que se centró en la industria automotriz y el consumo fundamental estuvo en los combustibles de origen fósil o "naftas", los grandes creadores de Dióxido de Carbono o CO2, el punto de partida del cambio climático.

La cuarta revolución protege la utilización de los recursos, principalmente el agua y la tierra, y busca un criterio circular de contenidos exclusivamente biológicos. Esta lógica muestra que el alza de productividad es sinónimo del auge constante de la sustentabilidad convertida en un criterio endógeno de la bioproducción avanzada.