Un chico entró a robar a un bar de Las Cañitas y el dueño le dio trabajo a su hermano

El adolescente que ingresó a robar en un bar de Palermo y el propietario del local. Foto: NA.

Uno de los hermanos del adolescente que fue aprehendido por el dueño de un bar de la zona de Las Cañitas, en el barrio porteño de Palermo, se presentó este viernes a trabajar en el local, tras ser convocado por el comerciante.

"Nada. Se puede cambiar", dijo el joven a la prensa antes de largarse a llorar, al ser consultado sobre lo que le diría a su madre. Su hermano menor, Martín, fue atrapado mediante un tackle de rugby por el dueño del bar, un exjugador de rugby que lleva el mismo nombre.

Martín, el dueño del bar 'Dalchemist', situado en Báez 260, abrazó al muchacho y sostuvo que no puede "hacer la vista gorda" con lo que plantea la realidad de los hermanos.

Se trata de cuatro jóvenes que fueron abandonados por sus padres tras sostener una violenta pelea de pareja en la que causaron destrozos en la precaria vivienda de José C. Paz, el distrito del noroeste del conurbano.

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Los detalles del robo al bar

El lunes por la tarde, Martín, de 15 años, entró al bar y le ofreció productos de limpieza a una clienta. Martín, el comerciante, le pidió que se retire e inmediatamente le preguntó a la mujer si conservaba su celular.

Ante la respuesta negativa, el propietario del comercio salió corriendo del bar y en la puerta atrapó al adolescente, que había concretado el robo con la modalidad conocida como "la tapadita".

Fue entonces cuando se produjo un diálogo entre el joven que había robado y el comerciante: ante un pedido de disculpa del muchacho, que ya había sido puesto a disposición de un policía, el dueño del bar le ofreció trabajo, aunque al darse cuenta de la edad del chico y la imposibilidad de emplearlo, le dijo que "iba a poder tener un plato de comida todos los días".

Además de conseguirle trabajo a uno de los hermanos del adolescente, que tiene 17 años y está a punto de cumplir 18, Martín, junto a otros comerciantes, organizó una especie de colecta para proveerlos de camas, muebles y electrodomésticos que los hermanos perdieron por las violentas peleas entre sus padres.