Atención viajeros: ¿qué tienen en común Bariloche, Barcelona y Venecia?

Venecia. Foto: Unsplash

Además de ser de las ciudades más visitadas de sus respectivos países, Argentina, España e Italia, San Carlos de Bariloche, Barcelona y Venecia tiene algo en común que las identifica por igual. Pero antes repasemos sus atractivos.

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Bariloche

Ubicada en la patagónica provincia de Río Negro y limitada por el lago Nahuel Huapi y la Cordillera, en cada estación ofrece un panorama diferente: los dorados y ocres del otoño o el blanco de la nieve en invierno, mientras que en primavera y verano está siempre florecida. Con el Cerro Catedral como fuerte atractivo para esquiar, se convirtió en el destino buscado para los viajes de egresados como para los paseos familiares. Además suma anualmente un calendario de actividades en el Centro Cívico: la Fiesta del Chocolate para Pascua, Bariloche a la Carta en octubre, la Fiesta de la Cerveza, y una Navidad más parecida a la del hemisferio norte en diciembre.

Bariloche. Foto: Bariloche.ar

Por estas actividades y los numerosos restaurantes que se instalaron en la ciudad y alrededores, se ha convertido en un polo gourmet muy atractivo. Cuna del chocolate, de los ahumados y la cerveza artesanal, alberga restaurantes jóvenes y dinámicos premiados, que ofrecen deliciosos menús de pasos. Todas estas cualidades hacen que Bariloche sea la ciudad favorita de los argentinos.

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Barcelona

La ciudad condal es la segunda más poblada de España después de Madrid y se encuentra entre las favoritas de los argentinos. Y más cuando tenemos vuelos directos desde Ezeiza. Ubicada a orillas del Mediterráneo, ofrece playa (la popular Barceloneta) y sierra, con pequeñas cimas para escalar y tener una panorámica del casco urbano. Además, tiene una larga y rica historia arquitectónica, empezando por los antiguos restos del asentamiento romano que fundó Barcelona, construcciones de estilo románico, el Barrio Gótico que muestra vestigios de la época medieval, hasta los exponentes del modernismo catalán como las obras del reconocido Antoni Gaudí, especialmente el inacabado Templo Expiatorio de la Sagrada Familia, el precioso parque Güell y la Casa Milà (también denominada La Pedrera).

Barcelona. Foto: Unsplash

Gastronómicamente, en el área urbana aparecen diversas cocinas extranjeras como la del Magreb, China y de África, a causa de la inmigración que ha ido recibiendo a lo largo del siglo XX. Explorar la comida típica de Barcelona permite disfrutar de sabores deliciosos y diversos: guisos marineros como el suquet de peix o la esqueixada de bacallà. O preparaciones de tierra adentro como la escudella i carn d’olla. Sin olvidar las butifarras con mongetes, las cocas, los canelones y, por supuesto, los calçots, con su deliciosa salsa romesco. Toda una aventura culinaria.

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Venecia

¿Quién no soñó con visitarla alguna vez y navegar en una góndola a través de sus canales? El centro histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, está situado en un conjunto de islas en la laguna de Venecia, en el norte del Adriático. Es uno de los destinos turísticos más impactantes y populares del mundo. Venecia está construida sobre un archipiélago de 118 pequeñas islas, unidas entre sí por 455 puentes. Es una ciudad peatonal donde los colectivos son lanchas (como las de El Tigre): los vaporettos que circulan por el Gran Canal, la vía de mayor movimiento.

Venecia. Foto: Unsplash

Fue un importante centro musical durante siglos. Desde Antonio Vivaldi a Richard Wagner o Ígor Stravinski buscaron inspiración allí. También fue cuna de famosos escritores como Marco Polo, Giacomo Casanova y Carlo Goldoni. Desde 1895 la alberga a la Bienal de Venecia, una Exposición Internacional de Arte de Venecia, que incluye al Festival Internacional de Cine nacido el 1932.

Venecia. Foto: Unsplash

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Lo que tienen en común

Estas tres ciudades instalaron un recurso económico que las distingue por sobre las otras: cobrar una tasa al alojamiento turístico o, en el caso de Venecia, al visitante. Se trata de un plus diario y extra que habrá que agregar a la tarifa de hospedaje (hoteles, albergues, hostels). En Bariloche, con el nombre de Ecotasa, es un porcentaje de valor de la habitación según las estrellas que tenga, actualmente oscila entre los $ 462 a $ 2.310 por noche y por persona, se paga por separado por medio de un QR y el hotel se encarga de controlar que así se haga. Tiene un tope de tres días consecutivos y, a partir del cuarto, ya no se aplica. El dinero recaudado invierte en promoción turística.

Bariloche

Barcelona estableció una tasa diaria por noche de alojamiento que acaba de aumentar a 4 euros y que se suma directamente a la tarifa hotelera. Esta medida se enmarca en una estrategia municipal que tiene como objetivo contribuir a financiar los servicios públicos de la ciudad que noten la presión de los visitantes. Principalmente el transporte público y las zonas con mayor afluencia como la Barceloneta.

Barcelona. Foto: Unsplash

En el caso de Venecia, usan la tasa de 5 euros por persona para regular el ingreso de los visitantes a la ciudad vieja. Las autoridades locales buscan así limitar la cantidad de turistas de paso. Sin embargo, incluso aquellos exentos de la tasa, como los que se alojan en las islas, deben registrar su viaje una web, como parte del esfuerzo por controlar y monitorear el turismo en la región. Debe abonarse antes de entrar y presentar el comprobante ante las autoridades.

Sin dudas se trata de un suplemento que encarece la planificación de un viaje. Y, atención, no son las únicas ciudades que lo cobran.