Para quienes buscan un destino diferente, donde la tranquilidad y el respeto por el medio ambiente son los protagonistas, este destino es, sin duda, una opción que vale la pena explorar.
Por Canal26
Jueves 17 de Octubre de 2024 - 10:32
En la Costa Atlántica Argentina existe una localidad que destaca por su serenidad y su compromiso con la naturaleza. Este destino combina la belleza de playas tranquilas con los inmensos bosques de pinos, que juntos crean un ambiente ideal para el descanso y la relajación.
Se trata de Costa del Este, que está situada dentro del partido de La Costa. A lo largo de sus calles de tierra, los visitantes pueden experimentar una sensación de calma que resulta difícil de encontrar en otros balnearios de la zona, lo que lo distingue por sobre el resto y la convierte en una opción viable para las vacaciones 2025.
Lo primero que sorprende al llegar a Costa del Este es su vegetación. La localidad fue cuidadosamente planificada para preservar su identidad verde, y la prueba de ello es la inmensa cantidad de pinos que la rodean. Esta característica le dio el título de la “playa del millón de pinos”.
A diferencia de otras localidades costeras, Costa del Este cuenta con estrictas normativas que protegen su ecosistema. Los vecinos, por ejemplo, optan por poner cercos verdes en lugar de rejas o vallas, una decisión que respeta la estética natural del lugar.
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Uno de los aspectos más peculiares de Costa del Este es la decisión de mantener la mayoría de sus calles sin pavimentar. Aunque a simple vista podría parecer una desventaja, este diseño tiene un propósito ecológico muy claro: evitar inundaciones.
Además de su riqueza natural, Costa del Este cautiva con su arquitectura. Las grandes cabañas de estilo alpino, rodeadas de álamos, acacias, aromos y eucaliptos, crean un paisaje único. Por otro lado, la Capilla Sagrado Corazón de Jesús, construida en ladrillo a la vista, es el resultado de un esfuerzo comunitario que permitió crear un espacio de culto en un entorno donde, hasta el año 2000, no existía una iglesia formal.
Este destino se presenta como un refugio ideal para quienes buscan una escapada tranquila, lejos del ruido y las aglomeraciones. Con su combinación de playas serenas, bosques frondosos y una comunidad comprometida con la sostenibilidad, esta localidad de la Costa Atlántica es un ejemplo de cómo el respeto por la naturaleza puede convivir con el turismo.
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