La información sobre las diferencias y similitudes entre estas dos enfermedades busca ayudar a las personas a identificar y abordar adecuadamente cada patología.
Por Canal26
Martes 19 de Marzo de 2024 - 09:46
En medio de un brote histórico del dengue, una enfermedad viral transmitida por el mosquito Aedes aegypti, es fundamental poder diferenciar sus síntomas de los del COVID-19, causado por el virus del SARS-CoV-2, debido a que ambos pueden manifestarse de manera similar en las etapas iniciales.
El último informe epidemiológico del Ministerio de Salud de la Nación reveló que el brote actual de dengue se cobró la vida de 79 personas y afectó a más de 120 mil individuos en el país. Esta enfermedad viral se transmite a través de la picadura de mosquitos infectados y puede presentar síntomas similares a los del COVID-19 en sus primeras fases, lo que puede generar confusión en el diagnóstico y tratamiento adecuado.
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Los síntomas del dengue incluyen fiebre, dolores musculares, en las articulaciones o en los huesos, malestar en los ojos (generalmente detrás), náuseas, vómitos y sarpullido. Estos signos suelen aparecer de cuatro a diez días después de la picadura del mosquito infectado.
Además, es fundamental destacar que el dengue no se transmite de persona a persona, a diferencia del COVID-19, que es altamente contagioso.
Por otro lado, los síntomas característicos del COVID-19 son fiebre, dolor corporal, dolor de cabeza, tos, dificultad para respirar, fatiga, dolor de garganta y congestión nasal. Sumado a estos síntomas, el coronavirus se destaca por ser una enfermedad respiratoria, lo que implica que los pacientes también pueden experimentar problemas respiratorios.
En cuanto al tratamiento, no existe un medicamento específico para el dengue, y la mayoría de las personas se recuperan con descanso y una adecuada hidratación, además del paracetamol. Por su parte, el tratamiento del COVID-19 varía según la gravedad de la enfermedad, pudiendo incluir medicamentos para aliviar los síntomas y en casos graves, hospitalización.
Asimismo, desde los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos recomiendan “acetaminofeno (también conocido como paracetamol) para controlar la fiebre y aliviar el dolor", al tiempo que advierten: “No hay que dar ibuprofeno, aspirina ni medicamentos que contengan aspirina”.
En el caso del COVID-19, la vacunación, en sus diversos tipos y plataformas, protegió a las personas de desarrollar una enfermedad grave a causa de la infección que provoca el virus SARS-CoV-2. Sin embargo, el hecho de que muchas personas no continúen con regularidad los esquemas de inmunizaciones, sumado a la aparición de nuevas variantes del virus, llevó a que se registren en diferentes países brotes de casos, que se tratan según las particularidades de la infección.
Es importante poder distinguir entre los síntomas del dengue y del COVID-19 para garantizar un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado en cada caso. Ante cualquier síntoma sospechoso, es recomendable consultar a un profesional de la salud para recibir la atención necesaria y seguir las medidas preventivas correspondientes para evitar la propagación de ambas enfermedades.
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