Asado ecológico: la nueva opción "sostenible" para mantener la tradición con menor impacto ambiental

Parrillas ecológicas. Foto: Unsplash.

El asado y la tradición van de la mano. Sin embargo, la histórica comida nacional evolucionó hacia opciones más sostenibles y tecnológicas, desplazando poco a poco a las, comúnmente conocidas, parrillas.

La cocción de una buena carne asada los domingos fue mutando con el paso de los años e incursionó en diferentes costumbres y métodos, como por ejemplo, las parrillas modernas.

Parrillas ecológicas. Foto: Unsplash.

¿Cuáles son las parrillas modernas? Las eléctricas y de pellets, que  se destacan por su control preciso de temperatura, menor emisión de humo y menor impacto ambiental.

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¿Cuáles son las ventajas de usar este tipo de parrillas?

Amigables con el medio ambiente: al usar combustibles más limpios, generan menos residuos y contaminación.

Mayor control de temperatura: permiten cocinar con precisión sin preocuparse por las brasas.

Menor emisión de humo: ideales para espacios reducidos o urbanos.

Parrilla tradicional. Foto: Unsplash.

Estas alternativas son ideales, portátiles y prácticas para espacios urbanos, aunque los puristas del asado defienden el sabor único del carbón.

El gusto ahumado que le aporta el carbón a la carne, continúa siendo distintivo e irremplazable, pero las nuevas opciones invitan a los asadores a priorizar la comodidad y el respeto por el medio ambiente.

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1. Comprar la carne y el carbón: el asador, usualmente con uno o más acompañantes, es el encargado de conseguir los cortes. También puede ocuparse del carbón y la ensalada.
2. Armado del fuego: lleva su tiempo y apurarlo no traerá ninguna solución. El asador se halagará si lo acompañan una guitarra y unas voces entusiasmadas.
3. Picada y vinos: ya con la carne en la parrilla, los comensales cortan queso, salame y jamón y descorchan el primer vino. Si es un asado improvisado, papas fritas y maní funcionarán de maravilla.
4. Chorizos y morcillas: suele ser lo primero que sale de la parrilla y mutan en choripanes y morcipanes. Hay un fuerte debate acerca de si son la estrella de la mesa o una simple entrada.
5. El asado: dependiendo de quién esté al mando, puede cocinarse vaca, cerdo o pollo. Salen de a tandas y el asador comerá siempre en la tabla de la que el resto "pincha" los cortes.
6. Aplauso: sin excepción.