En la antesala de la cumbre de Vilna, Francia analiza apoyar la entrada de Ucrania en la OTAN

Emmanuel Macron junto a Volodimir Zelenski. Foto: Reuters.

Desde el comienzo de la invasión rusa a Ucrania, en febrero de 2022, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski; pidió abiertamente protección ante los ataques ordenados por su par de la Federación Rusa, Vladimir Putin. La primera ayuda que reclamó el mandatario desde Kiev fue la ayuda militar, pero también -y no menos importante- la entrada de su país a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

La decisión no es simple y se ha venido dilatando desde entonces, y motivos no faltan: el hecho de que Ucrania ingrese a la Alianza defensiva implicaría el comienzo mismo de la Tercera Guerra Mundial, ya que todos los países miembros deberían atacar deliberadamente y declarar la guerra de manera frontal al Kremlin.

Pese a lo complejo de la coyuntura, y los peligros que encierra la medida del ingreso ucraniano, ahora el Gobierno francés contempla la idea de apoyar políticamente la entrada de Ucrania en la OTAN durante la cumbre de la Alianza Atlántica del mes próximo.

Este cambio de postura francesa, que se discutió en un consejo gubernamental de defensa el pasado día 12, buscaría incrementar la presión sobre Rusia para que acepte entablar negociaciones de paz mientras la contraofensiva ucraniana afronte problemas, añade.

Hasta ahora, EE.UU., Alemania y Francia se han opuesto a que la cumbre de Vilna del 11 y 12 de julio ofrezca perspectivas claras de ingreso a Ucrania, mientras que Polonia y las tres repúblicas bálticas (Estonia, Letonia y Letonia) defienden que esa cita emita ya un compromiso firme hacia Kiev.

Enceuntro previo entre Macron y Zelenski. Foto: Reuters.

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La postura francesa

El posible cambio de postura que se estudia en París no implicaría la entrada de Ucrania en pleno conflicto, sino abrir un camino hacia la adhesión de Ucrania, ofrecerle garantías de seguridad y sellar la ayuda militar occidental que recibe el país, detalla Le Monde. El presidente francés, Emmanuel Macron, ya dijo hace tres semanas en Bratislava que Kiev debía recibir garantías de seguridad "tangibles y creíbles".

De todos modos, es posible que las discusiones, que son muy complejas, podrían no estar suficientemente avanzadas para la cumbre de Vilna, indica el periódico.

El propósito final del gobierno francés es incrementar la presión sobre Moscú para que se decida a aceptar negociaciones de paz, visto que la contraofensiva ucraniana no ha logrado una ruptura clara en las líneas de defensa rusas en las primeras dos semanas.

La entrada en la Alianza de un país en guerra puede implicar la activación del ya famoso artículo 5 que establece la cláusula de asistencia mutua, algo que París no concibe. La guerra en Ucrania y la cumbre de la OTAN serán algunos de los asuntos que tratarán Macron y la jefa del Gobierno italiano, Giorgia Meloni, durante la reunión que mantendrán en el Elíseo.