Alarmante: 6 de cada 10 jóvenes quieren irse de Argentina

Jóvenes en el aeropuerto de Ezeiza. Foto: Twitter.

El Aeropuerto internacional de Ezeiza se está convirtiendo en la escenografía del arranque del viaje que más duele, del viaje del adiós al país, para siempre, en busca de una vida mejor.

Jóvenes recién egresados que se van con su título y con sus ilusiones a otro país. Creen que no vale la pena ni siquiera probar acá. “¿Qué es lo peor que te puede pasar afuera? ¿Que te vaya mal y tener que volver a la Argentina?”, señalan antes de subirse al avión.

Crisis económica, altos índices de desempleo e inseguridad, descreimiento de la política y desesperanza son los factores que hacen que los jóvenes busques su futuro en otro país. “Soy médica, estuve trabajando en todo lo que es pacientes COVID-19 durante un año, y ahora me voy a vivir a España”, dice una chica luego de hacer el chek-in. “Soy ingeniero naval, ella es abogada”: una pareja tomó la misma decisión ante “la falta de esperanza al futuro del país” pese a que tenían trabajo; “estábamos muy bien pero entre la inseguridad y la inestabilidad económica...”. Todos son testimonios recogidos en un informe del programa de Jorge Lanata, Periodismo Para Todos (PPT - Canal 13).

Las escenas que se ven en el Aeropuerto de Ezeiza son desgarradoras y se asemejan a las vividas tras la crisis de 2001, 6 de cada 10 estudiantes universitarios quieren irse de Argentina.

“Uno se forma, estudia, trabaja todos los días, pero vos querés progresar y es imposible, es imposible llegar a fin de mes cómodo”, señala una programadora que seguirá su vida en Dinamarca.

Un joven profesional tiene en Argentina el salario más bajo de toda la región: en la comparativa -con el dólar libre- gana un tercio de lo que ganaría en Chile; la mitad de lo que ganaría en Perú; y un 35% menos de lo que ganaría en México o Brasil.

Las escenas que se ven en el aeropuerto son desgarradoras. Padres que abrazan a sus hijos, familias enteras que se llevan hasta sus mascotas, jóvenes que dejan amigos y amores. Se van a empezar de cero en otro lado, en otra cultura. En muchos casos se trata de gente que tenía trabajo y lo perdió, se cansaron de pelear.