Oreille Antoine de Tounens afirmó en 1860 que las regiones de la Araucanía y la Patagonia oriental no necesitaban depender de ningún otro Estado y tomó posesión de aquella región unas cuatro veces. Su increíble historia.
Orélie Antoine de Tounens fue un aventurero francés que nació el 12 de mayo de 1825 en la comuna de Chourgnac y que desde 1851 se desempeñó como procurador del tribunal de primera instancia y de comercio del distrito de Périgueux. Lo que pocos saben es que cruzaría caminos con lo que hoy es gran parte del sur argentino al intentar unas cuatro veces ser "rey de la Patagonia". Una historia tan real como increíble.
En 1854 comenzó a tomar contacto con libros de aventuras lo que lo impulsó a seguir ese rumbo y con el objetivo de "reunir las repúblicas hispanoamericanas bajo el nombre de una confederación monárquica constitucional dividida en diecisiete estados". En 1858 llegó a Valparaíso, Chile, donde se instaló y aprendió el español. Años después se mudó a Valdivia en búsqueda de conocer a los líderes mapuches ya que, es necesario mencionar, para esa época la Patagonia era territorio que estaba habitado por tribus de mapuches que dominaban la región y tenían total independencia de los gobiernos de Argentina y el trasandino.
Junto con dos compatriotas, Lachaise y Desfontaines, viajó hasta la Araucanía para contactar al lonko Quilapán, jefe de los wenteche-arribanos, para comunicarle su plan para fundar un Estado para el pueblo mapuche con la promesa de lograr apoyo diplomático francés. El 17 de noviembre de 1860, por un decreto redactado por él mismo, Antoine de Tounens afirmó que las regiones de la Araucanía y la Patagonia oriental no necesitaban depender de ningún otro estado y fundó el Reino de la Araucanía, del se proclamó soberano con el nombre de Orélie Antoine I.
Te puede interesar:
El vergonzoso uso político del cadáver de Carlos Gardel: casi 50 días, 5 países y sospechas de corrupción
Días después -el 20 de noviembre- Tounens decidió anexar los territorios de la Patagonia al reino, fijando sus fronteras en los ríos Biobío (Chile) y Negro (Argentina) por el norte; el océano Pacífico por el oeste; el océano Atlántico por el este y el estrecho de Magallanes por el sur. El presidente chileno, José Joaquín Pérez, no tardó en enterarse de esto e instruyó a las reparticiones estatales la orden de encontrar a Tounens y apresarlo. Fue traicionado por uno de sus colaboradores chilenos llamado Juan Bautista Rosales y entregado a la policía.
Fue interrogado el 7 de ese mismo mes por el intendente de Arauco, el coronel Cornelio Saavedra Rodríguez y llevado a juicio donde enfermó de disentería y se le cayó el cabello. Acusado por perturbar el orden público, fue condenado en primera instancia a diez años de cárcel. Pensando que iba a morir pronto, redactó su testamento donde escribió:
"Considerando que, en previsión de nuestro fallecimiento, debemos determinar desde ya los derechos a nuestra sucesión; y en tal virtud instituimos como nuestros sucesores a la corona de Araucanía y Patagonia a Jean de Tounens, nuestro padre bien amado".
Fue declarado insano el 20 de octubre del mismo año y enviado a un manicomio en Santiago. El cónsul francés, Henri Cazotte, logró intervenir para que sea liberado y repatriado a su país. De Tounens no se quedó callado, pasó años en Europa haciéndose propaganda sobre su paso por Araucanía e incluso logró reunir dinero para volver y "reclamar por su trono" a fines de 1869.
Te puede interesar:
¿Desde cuándo y por qué se empezó a armar el arbolito en Buenos Aires?
Su regreso no fue como esperaba, para ese entonces Chile y Argentina habían comenzado un proceso para colonizar esas tierras y debió dejar nuevamente el país trasandino puesto que su cabeza ya tenía un precio. Volvió a Francia en 1872 tras un breve paso por Buenos Aires.
"El rey" intentó dos veces más volver, en 1874 y 1876, pero solo pudo llegar hasta Buenos Aires y forzado a regresar al viejo continente. Logró instalar su corte en un pequeño departamento en París, entregando títulos nobiliarios a quienes financiaran la vida del rey en el exilio hasta su muerte en 1878. Está enterrado en un cementerio municipal de Dordoña con una lápida que dice: "Aquí reposa De Tounens Antoine Orllie, rey de Araucanía y de Patagonia Muerto en Tourtoirac el 17 de septiembre de 1878".
Sus descendientes y el pueblo de Tourtoirac lo recuerdan en cada agosto con una misa en honor a Santa Rosa de Lima, primera santa de América, visitando al Museo de los Reyes de Araucanía y Patagonia de Tourtoirac y dejando un ramo de flores en la tumba del "rey" de Araucanía.
Por Yasmin Ali
*Tw: @Yas__Friends
1
El vergonzoso uso político del cadáver de Carlos Gardel: casi 50 días, 5 países y sospechas de corrupción
2
La Ruta de la Seda: ayer y hoy
3
La crisis de los Euromisiles
4
La historia del poder nuclear de Rusia
5
Mates en la trinchera de la muerte: el vicio desconocido de la tropa inglesa durante la Primera Guerra Mundial