Una "jaula" en el océano: el submarino de alta tecnología para 43 marineros que no tiene habitaciones ni baño propio

Si bien su construcción significa un hito para la industria, la vida dentro de este vehículo impone grandes desafíos, ya que los tripulantes deben turnarse para bañarse y hacer sus necesidades, lo que exige una estricta organización y disciplina.

Por Canal26

Sábado 22 de Febrero de 2025 - 20:00

S-81 Isaac Pearl de la Armada Española. Foto: Armada Española S-81 Isaac Pearl de la Armada Española. Foto: Armada Española

La Armada Española avanza en el proceso de certificación de un nuevo submarino que promete revolucionar la industria. Se trata del S-81 Isaac Pearl, diseñado y construido por la empresa Navantia y que se espera esté operativo en julio de este 2025.

El sumergible será el primero de la serie S-80 Plus y representa un hito para la industria naval nacional tanto por su tecnología avanzada como por su capacidad de ataque. Pese a ello, la vida a bordo representa un desafío extremo para los 43 tripulantes.

S-81 Isaac Pearl de la Armada Española. Foto: Armada Española S-81 Isaac Pearl de la Armada Española. Foto: Armada Española

Desde que fue entregado a la Armada en noviembre de 2023, el S-81 lleva acumulados más de 130 días de navegación, con hasta tres jornadas consecutivas de completa inmersión. Ahora, se espera que en los próximos meses las pruebas se intensifiquen con misiones de hasta un mes de duración con la idea de evaluar autonomía y rendimiento. 

En esa línea, en mayo se llevará a cabo su primer lanzamiento de torpedos con fuego real. El ensayo será en aguas de las Islas Canarias y significa un paso clave antes de su integración definitiva a la flota oficial. 

Submarino. Foto: Unsplash.

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La difícil vida de la tripulación del S-81

Más allá de la tecnología de vanguardia del S-81, como su sistema de propulsión independiente del aire (AIP) que le permite operar sumergido por largos periodos sin necesidad de salir a la superficie, la experiencia de la tripulación en su interior roza lo extremo.

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El vehículo no tiene habitaciones privadas, solo posee tres inodoros y dos duchas compartidas. Así, los 43 marineros deben adaptarse a un estilo de vida muy lejos de lo cómodo y más acercado a la funcionalidad. 

La optimización del espacio es absoluta, los tripulantes duermen en camarotes reducidos y comparten los escasos espacios comunes disponibles. Además, deben turnarse para bañarse y hacer sus necesidades, lo que exige una estricta organización y disciplina. 

A diferencia de otros submarinos de la Armada Española, el S-81 no tiene acceso a internet ni a redes sociales. La comunicación con el exterior es limitada, a fin de que los navegantes mantengan la concentración en el trabajo en equipo.

Para soportar este estilo de vida, la preparación y el entrenamiento son esenciales, por lo que la tripulación realiza varias simulaciones para enfrentar emergencias como pueden ser incendios o entrada de agua, ya que en los submarinos no existe margen de error y la capacidad de reacción es crucial para mantener un trayecto seguro y operativo.

S-81 Isaac Pearl de la Armada Española. Foto: Armada Española S-81 Isaac Pearl de la Armada Española. Foto: Armada Española 

Fehmarnbelt Fixed Link, el túnel sumergido que unirá Alemania y Dinamarca. Foto X @AdaReyesB

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Cómo es el submarino español S-81

El S-81 Isaac Peral es clave en la modernización de la Armada Española. Se trata del primero de una serie de cuatro submarinos de la clase S-80, con entregas previstas en 2026, 2028 y 2030.

Diseñado para operar con un alto nivel de automatización y autonomía, posee una eslora de 80,8 metros y un desplazamiento de alrededor de 3000 toneladas en inmersión.

Además, cuenta con seis lanzatorpedos y un sistema de combate avanzado desarrollado por Navantia Sistemas, que también puede disparar minas y misiles contra buques de superficie y objetivos en tierra.

Los torpedos del S-81 pueden alcanzar más de 40 kilómetros de distancia, mientras que su diseño incluye más de 6000 cables y 10.000 tuberías que garantizan su óptima operatividad. En tanto, puede sumergirse a más de 300 metros de profundidad y descender rápidamente a profundidad operativa en menos de cinco minutos.

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