Los mosquitos que transmiten el dengue se adaptan a las temperaturas locales como consecuencia del cambio climático

Este descubrimiento plantea nuevos desafíos y destaca la necesidad de una vigilancia continua para abordar las complejidades de la propagación de enfermedades transmitidas por mosquitos.

Por Canal26

Lunes 11 de Marzo de 2024 - 11:57

Hembra adulta de un Aedes aegypti, el mosquito transmisor de la fiebre amarilla. Foto: EFE. Hembra adulta de un Aedes aegypti, el mosquito transmisor de la fiebre amarilla. Foto: EFE.

En medio de la creciente crisis climática, científicos en Estados Unidos descubrieron que el Aedes aegypti, conocido como el mosquito de la fiebre amarilla, posee una capacidad sorprendente para adaptarse a las temperaturas locales. Este hallazgo, fruto de un estudio liderado por el entomólogo Matthew Thomas en colaboración con la Universidad de Florida (UF),resaltó la importancia de comprender la transmisión de enfermedades a nivel local en el contexto del cambio climático.

El Aedes aegypti, una de las especies invasoras más importantes a nivel mundial, infecta anualmente a más de 400 millones de personas con virus como el dengue, la fiebre amarilla, la chikungunya y el Zika. El estudio se centró en examinar la adaptación térmica de estos mosquitos, un aspecto crítico que suele pasarse por alto en los modelos de evaluación del impacto del cambio climático en las enfermedades transmitidas por insectos.

Hembra adulta de un Aedes aegypti, el mosquito transmisor de la fiebre amarilla. Foto: EFE. Hembra adulta de un Aedes aegypti, el mosquito transmisor de la fiebre amarilla. Foto: EFE.

Thomas señaló la necesidad de abordar la transmisión de enfermedades a nivel local, destacando que la inferencia de los efectos de la temperatura de un lugar a otro puede no ser precisa. Según el Instituto de Investigación Científica de Especies Invasoras (ISRI) de la UF, muchos modelos ignoran la influencia potencial de la adaptación térmica en los mosquitos, afectando su rendimiento y capacidad para transmitir enfermedades.

"La conclusión de nuestro estudio es que, si queremos comprender completamente la transmisión en un lugar y cómo esto podría cambiar en el futuro, debemos estudiar los mosquitos a nivel local y no asumir que la forma en que la temperatura afecta la transmisión en un sitio necesariamente se puede extrapolar a todos los demás sitios", subrayó el autor de la investigación. 

Encontrá más vídeos

Dengue. Foto: Reuters.

Te puede interesar:

La lucha contra el dengue: la UBA entregará repelente gratuito de producción propia

El abordaje de la investigación

El director del ISRI explicó que los resultados sugieren que los mosquitos pueden optimizar su rendimiento en su entorno local, lo que tiene implicaciones significativas para comprender y predecir el riesgo de transmisión de enfermedades. Además, destacó la importancia de examinar la biología de los mosquitos para obtener predicciones precisas.

"Esto es potencialmente importante porque sugiere que, si deseamos hacer predicciones precisas del riesgo actual o futuro de distribución de enfermedades como el dengue o el Zika, podríamos necesitar examinar la biología de los mosquitos a nivel local y no simplemente asumir que podemos tomar un modelo de transmisión y extrapolarlo en el tiempo y el espacio", precisó Thomas.

Matthew Thomas, director del Instituto de Investigación Científica de Especies Invasoras (ISRI) de la UF. Foto: EFE. Matthew Thomas, director del Instituto de Investigación Científica de Especies Invasoras (ISRI) de la UF. Foto: EFE.

El Aedes aegypti, según explicó el experto, generalmente limita su estadía a los trópicos y subtrópicos. Por lo tanto, la temperatura óptima para exponerse ronda, probablemente, entre los 25 y 30 grados centígrados. Adicionalmente, detalló que el potencial para transmitir enfermedades de los mosquitos se verá "gravemente" afectado por debajo de los 20 grados centígrados o por encima de 35 grados centígrados aproximadamente.

"En promedio, a medida que el clima calienta, esperamos que las condiciones adecuadas se desplacen más hacia el norte, lo que potencialmente permitirá que los mosquitos amplíen su distribución y que también aumente potencialmente el número de meses aptos para la transmisión de enfermedades", señaló.

El estudio finaliza con la anticipación de un seguimiento, centrado en entender cómo la adaptación local de los mosquitos puede influir en los patrones de riesgo de transmisión. "Actualmente no se conoce si los mosquitos se han adaptado a condiciones específicas y cómo esta adaptación ha ocurrido, pero nuestros resultados sugieren que esto es probable y que podría determinar el riesgo de transmisión local", concluyó. 

Notas relacionadas