Mitos: ¿Es la margarina realmente más saludable que la manteca?

Manteca. Foto: Unsplash.

Algunos prefieren untarla sobre una tostada durante el desayuno, mientras que otros la incorporan en la cocina para una variedad de preparaciones. La incertidumbre acerca de cuál es la elección más saludable, si la margarina o la manteca, genera interrogantes entre los consumidores. Según los expertos, ambas alternativas poseen propiedades tanto negativas como positivas, pero también sugieren otros sustitutos con notables beneficios para la salud.

“Esta controversia se debe principalmente a que la gente no comprende que tienen diferentes composiciones en las que hay que pensar antes de consumirlas”, explica Annete Marum, nutricionista y doctora en Nutrición Genética por la Universidad Federal de São Paulo (Unifesp).

Por lo tanto, la elección entre ambas opciones dependerá de la cantidad que se consuma y de las recomendaciones específicas de la dieta proporcionadas por profesionales de la salud y adaptadas a las necesidades individuales de cada persona.

 Las personas que quieran controlar el colesterol “malo” deberían evitar el consumo de ambos alimentos. Foto: Unsplash.

Te puede interesar:

No es solo genética: el hábito que conviene abandonar a los 50 para alcanzar la longevidad

Entender las diferencias

Para comprender los aspectos positivos y negativos de cada opción, es esencial conocer su composición. La manteca, de origen animal, se elabora a partir de crema de leche batida. En cambio, la margarina, de origen vegetal, se produce mediante el proceso de hidrogenación de aceites, como los de girasol o maíz.

La grasa saturada presente en la manteca es de fácil digestión para el organismo y se utiliza como fuente de energía, lo cual es un aspecto positivo. Sin embargo, en cantidades excesivas puede traer riesgos para la salud.

La margarina, rica en grasas insaturadas, tiene el potencial de incrementar los niveles de colesterol “bueno” (HDL) y reducir los niveles del denominado colesterol “malo” (LDL).

Sin embargo, la presencia de grasas trans en productos de origen vegetal se considera un aspecto desfavorable. Debido a su alteración química, el cuerpo enfrenta dificultades en su proceso digestivo, y, por lo tanto, puede acumularse tanto en la sangre como en los órganos importantes.

La manteca y la margarina poseen propiedades tanto negativas como positivas para la salud, según los expertos. Foto: Unsplash.

De acuerdo a expertos en la materia, las personas que intentan controlar el colesterol “malo” deberían evitar el consumo de manteca, pero también de la margarina, ya que contiene grasas trans y no es la mejor alternativa.

Te puede interesar:

Eliminar arrugas, generar colágeno y rejuvenecer la piel: la infusión natural de múltiples propiedades para el organismo

Un reemplazo ideal con grandes beneficios para la salud: el aceite de oliva

Un estudio llevado a cabo por la prestigiosa Universidad de Harvard, reveló que el aceite de oliva se destaca como una elección ideal debido a sus amplios beneficios para la salud. Entre ellos se encuentran:

• Eleva los niveles de colesterol HDL (bueno).
• Disminuye el colesterol LDL (malo).
• Beneficia el control de la hipertensión arterial.
• Previene la aparición de diabetes.
• Evita las enfermedades cardiovasculares.
• Ayuda a perder peso.

La investigación dio a conocer que sustituir la ingesta diaria de 10 gramos de otras grasas, como la margarina o la manteca, por aceite de oliva se asoció con un riesgo entre 8 a 34% menor de mortalidad.

 El aceite de oliva tiene grandes beneficios para nuestro cuerpo. Foto: Unsplash.

"Los médicos deberían aconsejar a los pacientes que reemplacen ciertas grasas por aceite de oliva para mejorar su salud”, afirmó Marta Guasch-Ferré, investigadora principal del Departamento de Nutrición de la Escuela de Salud Pública de Harvard y líder del estudio.

Te puede interesar:

Dieta Okinawa: el secreto japonés para una alimentación equilibrada y una vida longeva

Entonces, ¿cuál es más sana?

A pesar de que las margarinas actuales redujeron su contenido de grasas trans, los expertos aún se niegan a afirmar que sean más “saludables” que las mantecas. En este sentido, coinciden en que ambas pueden formar parte de la dieta siempre y cuando se consuman con moderación y de acuerdo con las necesidades individuales. No obstante, sugieren priorizar alternativas más sanas, como el aceite de oliva.