No las tires: cuáles son las semillas ricas en magnesio que ayudan a producir proteína

Semillas. Foto Unsplash.

El cuerpo necesita de nutrientes esenciales para que el cuerpo funcione correctamente, tales como el magnesio y las proteínas. De hecho, el magnesio es un mineral clave para la función muscular, el sistema nervioso y la salud de los huesos, mientras que las proteínas son ideales para el desarrollo muscular, la producción de enzimas y hormonas, y la regeneración de tejidos. Pero lo que pocos saben es que la semilla de calabaza puede aportar ambos nutrientes. 

Según los expertos, el consumo de esta semilla es la forma más rápida y sencilla de incorporar estos nutrientes esenciales a la dieta diaria. Por esta razón, se recomienda no tirar las pequeñas pepitas que se encuentran en el interior de esta verdura, sino guardarlas para comerlas crudas o tostadas en diferentes preparaciones. 

Semillas de calabaza. Foto: Unsplash.

Su alto contenido de zinc y hierro, generan que estas semillas sean fundamentales en la producción de proteínas. El zinc ayuda a mejorar la síntesis de proteínas y la producción de ADN, los cuales son claves para la división celular y el crecimiento de nuevos tejidos, mientras que el hierro es vital en la creación de hemoglobina, la proteína que transporta el oxígeno a través de la sangre a todos los tejidos del cuerpo. 

Las pepitas pueden incluirse en preparaciones como snacks, ensaladas, cereales y yogur, panes y postres, batidos, sopas y cremas, a platos principales y salsas y pesto, para aportar grasas, hidratos de carbono, fibra, vitaminas, calcio, hierro, fósforo, manganeso, y potasio, entre otros. 

Semillas de calabaza. Foto: Unsplash.

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¿Cuáles son los beneficios de las semillas de calabaza para la salud?

Las semillas de calabaza son una gran fuente de nutrientes esenciales, los cuales traen varios beneficios para la salud, entre ellos:

• Mejorar la salud cardiovascular: los ácidos grasos insaturados, como los omega-3 y omega-6, como también el magnesio, contribuyen a reducir el colesterol LDL, aumentar el HDL y regular la presión arterial, por lo que son ideales para proteger la salud del corazón.
  
  
• Fortalecer el sistema inmunológico: tanto el zinc, como el magnesio que se encuentran presentes en las semillas de calabaza son fundamentales para la producción de células inmunitarias y la regulación de la respuesta inmunológica, ayudando a prevenir infecciones.
  
  

Semillas de calabaza. Foto: Unsplash.

• Promover la salud digestiva: las semillas son una fuente rica en fibras, por lo que fomentan un tránsito intestinal saludable, previniendo el estreñimiento y mejorando la absorción de nutrientes.
  
  
• Como protección contra la osteoporosis: el alto contenido de zinc y magnesio de las semillas de calabaza contribuyen a mantener la densidad ósea, por lo que ayudan a prevenir la descalcificación, fortaleciendo los huesos.
  
  
• Reducir la inflamación: tanto los antioxidantes, como la vitamina E, y los ácidos grasos poliinsaturados que se encuentran en las semillas, aportan a la reducción de la inflamación en el cuerpo, mientras protegen las células del daño oxidativo.