¿Qué es la Sisifemia, el trastorno que afecta a trabajadores y puede llevar al estrés y la frustración?

Estrés. Foto: Unsplash.

Muchas personas se encuentran abrumadas ante objetivos, ideales o estándares titánicos o extremadamente ambiciosos que resultan difíciles de alcanzar y que derivan en tierras de desmotivación, estrés e improductividad.

De este modo, la sisifemia aparece cuando los trabajadores, empleados, emprendedores o profesionales independientes tienen que empujar por la montaña la pesada roca de objetivos inalcanzables, que se retroalimentan e incrementan día a día, lo que deriva en un sentimiento de impotencia al no lograr concluir las tareas, a pesar de estar dedicando el máximo rendimiento y tiempo para conseguirlo.

Estrés y ansiedad. Foto: Unsplash

La Sisifemia se expresa en ansiedad, depresión, trastornos del sueño, consumo de sustancias tóxicas, dependencia de psicofármacos, trastornos cardiacos, hipertensión, procesos vásculo-cerebrales, cefaleas, dolores de espalda, alteraciones en la alimentación o enfermedades de la piel. En el plano cognitivo, puede reducir la atención y concentración, así como afectar la memoria de corto plazo.

Te puede interesar:

Salud mental: qué es el síndrome de burnout y cuáles son las claves para combatirlo

¿Qué consecuencias tiene?

"El desbalance entre el esfuerzo puesto en una meta laboral y los resultados obtenidos, en un marco de extrema exigencia y ansiedad, puede ser un escenario propicio para nuevas respuestas emocionales y comportamentales de los trabajadores que invaden la zona de bienestar laboral y personal, atentando contra la productividad y la calidad de vida", explica Silvana Vattimo, licenciada en Psicología (M.N:48082)

En consecuencia éstas manifestaciones, se llega a un cuestionamiento del propio valor y capacidades para hacer frente a los desafíos, afectando el autoconcepto. Esto provoca, en ocasiones, irritabilidad que trasciende lo personal, afectando las relaciones sociales, generando aislamiento o conflictos con el entorno.

Estrés. Foto: Unsplash.

Si bien pueden encontrarse síntomas en común con el ya conocido síndrome de burnout o trabajador quemado, en la sisifemia el aspecto protagónico es la obsesión por crecer en el trabajo, exigiendo a la máxima performance, a pesar del costo asociado.

"Hallar el equilibrio entre la superación personal y la sobre-exigencia ante lo imposible es un desafío altamente complejo. Más aún, si sumamos elementos del contexto que suman presiones adicionales: culturas laborales que no dimensionan la importancia del bienestar laboral, escenarios económico-políticos turbulentos e inciertos, conflictos sociales latentes, etc", completó la también directora de SCI Comunidad.